Sevilla
había sido el lugar elegido por el Gobierno para
celebrar la Cumbre de los Jefes de Estado de la
Unión Europea, los días 21 y 22 de junio, que
pondría fin a los seis meses de presidencia
española. Paralelamente, partidos políticos,
sindicatos y ONG´s pretenden encauzar el movimiento
anti-globalización y preparan su contra-cumbre.
A esto se añade la
convocatoria de Huelga General el día 20 de junio,
realizada por los sindicatos de estado UGT y CCOO,
con motivo de la reforma del desempleo, y que
tendría su centro en Sevilla.
Ante estos
acontecimientos CNT tenía que estar en la calle
durante estos tres días, y dejar oír su mensaje
libertario, diferente del de sindicatos oficiales,
partidos políticos y ONG´s más o menos colaboradores
con el poder.
Los preparativos
Ya desde las
primeras reuniones del Foro Social no nos gusta su
manera politizada de plantear la contra-cumbre. Por
ello se decide crear una coordinadora de grupos
libertarios que diese una respuesta propia a la
cumbre europea.
Así que varios
Sindicatos de la CNT de Andalucía, junto al Ateneo
Libertario de Sevilla, y otros grupos anarquistas o
afines, formamos "Anarquistas Contra el Capital".
La coordinadora
anarquista prepara un programa de actividades que se
inician con las jornadas libertarias de los días 14
y 15 de junio, desarrolladas en una nave ocupada y
acondicionada expresamente para los actos contra la
cumbre.
Destacar la gran
asistencia a las conferencias y posterior charla
debate del día 14.
El programa de
actividades de la coordinadora también incluye el
apoyo a los actos convocados por CNT para el día de
la Huelga General, establecer un punto de
información permanente en la calle durante los días
de la cumbre, una concentración antiglobalización de
las 14.00 a las 22.00 horas el viernes día 21 en la
Plaza del Pumarejo, que es legalizada por la CNT de
Sevilla, y que incluirá una comida popular,
micrófono libre, talleres y otras actividades
descentralizadas, y finalmente la asistencia como
grupo separado a la manifestación convocada por el
Foro para el sábado día 22.
En cuanto a la
jornada de Huelga General del día 20, la CNT de
Sevilla legaliza una manifestación, a la que se
invita a los sindicatos de la regional, y cuyo
recorrido tiene que ser pactado con la Delegación
del Gobierno, pues el recorrido propuesto no es
autorizado.
Durante los días
previos se realiza una gran labor de propaganda,
tanto respecto de la huelga como contra la cumbre
europea, con reparto de folletos, pegada de
cartelería, pintadas y acciones diversas.
En la nave ocupada
se celebran las últimas asambleas de la
coordinadora, en español y en ingles
simultáneamente, por el gran número de extranjeros
que participan.
Y toda esta
actividad previa, bajo la constante vigilancia de
las fuerzas represivas del estado. Porque desde
meses atrás Sevilla estaba literalmente tomada por
la policía, con controles en todas sus entradas y la
omnipresencia de la policía secreta, aunque a veces
se la debería llamar "indiscreta".
El local del
sindicato y la nave ocupada están permanentemente
bajo vigilancia policial, que también se extiende a
muchos afiliados y simpatizantes.
Jueves, 20 de
junio el día de la Huelga General
Y llega el día. A
las 7.00 horas un piquete de CNT, atendiendo la
carta de unos trabajadores, acude a la empresa para
que esos trabajadores amenazados por el patrón
puedan ejercer su derecho de huelga. De paso se
reparte propaganda por todo el polígono industrial.
La huelga ha sido
ampliamente secundada en Sevilla: las fabricas están
cerradas, los transportes parados y casi todo el
comercio cerrado.
A las 12.00 horas,
bajo una abrumadora presencia policial, comienza la
manifestación de la CNT en el Puente de la Barqueta.
Casi todos los asistentes que se acercan al punto de
partida son identificados y registrados por la
policía.
A pesar de todo se
concentran más de 500 personas, que hacen el
recorrido de la manifestación tras las pancartas
"contra la reforma-paro, movilización permanente" y
"ni dios, ni patria, ni patrón, ANARQUÍA", rodeados
por la policía.
Detrás de la
manifestación desfilan no menos de 40 furgonetas de
la policía. Todo un espectáculo.
La manifestación
con una comida que varios compañeros del sindicato
habían preparando en los Jardines del Valle.
Fotografías de
esta manifestación han sido publicadas por casi toda
la prensa nacional o local, incluso salimos en la
portada del diario francés "Le Figaro".
Por la tarde,
mientras unos compañeros descansan, otros se
encuentran ya en el punto de información
antiglobalización en la plaza del Pumarejo y la nave
ocupada, que durante toda la tarde no deja de
recibir a gente venida de todos lados. Y eso a pesar
de la asfixiante presencia policial en la zona.
Viernes, 21 de
junio Primer día de la contracumbre
El viernes amanece
con una situación tensa. Los antidisturbios han
rodeado toda la manzana de la nave, listos para
intervenir. Los compañeros que se encuentran allí
tienen que esconderse en una casa de pisos contigua,
mientras entra la policía en la nave. Han avisado al
sindicato para que no se les llame al móvil para no
ser detectados. Después de una hora y media pueden
salir a la calle, donde son parados por la policía
para identificarlos y registrarlos. A uno le ponen
una denuncia por usurpación de propiedad privada,
que se niega a firmar, y lo tienen retenido durante
otra hora.
Por lo que pudiera
pasar, la coordinadora anarquista tiene preparado un
servicio jurídico para atender a cualquier detenido
a cualquier hora del día, y un servicio médico
propio. En el local del sindicato se centraliza la
información telefónica.
A las 14.00 horas,
como estaba previsto, se inician los actos en el
Pumarejo. La tensión es grande, hay un desorbitado
despliegue policial por toda la zona. Todas las
entradas a la plaza están bloqueadas por uno o dos
controles policiales en los que se identifica y
registra a todos los que se acercan a la
concentración. Un compañero le pide el número de
placa a unos policías que lo retienen y se lleva dos
hostias, otros son insultados o amenazados por
policías, a otros les quitan objetos personales,
etc...
A pesar de todo,
los actos se van realizando como estaban previstos:
la comida popular, el micrófono abierto, los
talleres de máscaras y de ocupación, el continuo tam-tam
de tambores, etc… todo ello con una asistencia
importante: entre 300 y 500 personas en todo
momento.
A las 21.00 horas
aumenta la tensión. Queremos salir de la plaza en
pasacalles y manifestación del tipo "reclame the
streets", sin itinerario prefijado. Pero la policía
bloquea todas las salidas y lo impide. En cada
intento de salida, las "mascaras" se revuelcan por
el suelo ante policías atónitos, dispuestos a
disparar sus bolas de goma.
La policía se ha
acercado a la plaza por todas las entradas y va a
cargar, están deseando! Preparan escudos y porras,
cargan sus lanzadores de pelotas de goma y apuntan a
los manifestantes. Unos compañeros de Málaga que
pretenden incorporarse a la concentración son
rechazados por el segundo control policial: "- Iros
si no queréis ser los primeros en cobrar. Vamos a
cargar ya."
Pero nos salva la
campana. Una manifestación de ecologistas que
finalizaba en la Alameda de Hércules, decide
inesperadamente continuar hasta el Pumarejo. Cuando
la policía va a cargar aparece el pasacalles
ecologista por el fondo de la calle, y la policía se
para. La ocasión es aprovechada y salimos los
"anarquistas contra el capital" al encuentro de la
otra manifestación, escoltados por la policía que
sigue apuntando sus armas antidisturbios. Juntas las
dos manifestaciones vamos hasta la Alameda y
espontáneamente seguimos hacia el centro de la
ciudad, hasta que un brutal cordón policial en la
plaza del duque hace que la manifestación retroceda
y se disuelva.
22 de junio El día
de la gran manifestación
11.00 horas.
Muchos "anarquistas contra el capital" deciden
sumarse al acto convocado a última hora por el Foro
Social en la Plaza del Salvador, en solidaridad con
los inmigrantes encerrados desde hace días en la
Universidad Pablo de Olavide. Se pretende un
encierro en la Iglesia del Salvador, en pleno centro
de Sevilla. La plaza está abarrotada de gente y la
policía no puede cargar a lo bestia. Aun así golpean
con puños y porras a algunos compañeros. Los novios
de una boda que va a entrar en la iglesia saludan
puño en alto y dan gritos de ánimo a los
inmigrantes, entre los vítores de los manifestantes.
La policía no sabe que hacer. El párroco accede a
que el encierro sea en el patio lateral de la
iglesia. La policía pretende cerrarles la verja, y
ante la oposición de algunos compañeros hay nuevos
golpes e insultos de los policías. Finalmente el
encierro se consuma y la policía tiene que tragar.
Allí estarán
encerrados hasta las 19.30 horas, en que salen para
unirse a la gran manifestación unitaria convocada
por el Foro. "Anarquistas contra el Capital" había
decidido sumarse a esta manifestación aunque como
grupo separado, al final de la misma.
A las 20.00 horas
unas 100.000 personas han acudido a la Estación de
Santa Justa de donde parte la manifestación.
Marchamos unos 500 a la cola de la manifestación
tras la pancarta "El mundo no es de ell@s y nosotros
somos más. POR LA GLOBALIZACIÓN SOCIAL"
En todas las
bocacalles del recorrido, hay una fuerte presencia
policial, y dos helicópteros sobrevolando. Grupos de
unas 50 motos de la policía con su conductor y otro
bestia de paquete con el lanzador de pelotas de goma
en ristre se pasean por las calles contiguas.
La manifestación
transcurre sin incidentes serios. Se agradece a
algunos vecinos que echen agua con manguera a los
manifestantes pues hace un calor sofocante. A mitad
del recorrido, la CNT y los "Anarquistas contra el
Capital", se adelantan hasta la mitad de la
manifestación. Con ello se evita que un grupo de
enmascarados dieran lugar a una carga policial sobre
la cola de la manifestación. Somos pocos para hacer
frente a los 9.600 policías desplazados hasta
Sevilla. Después de más de 2 horas de recorrido,
concluye el acto.
Algunas
conclusiones
Durante estos tres
días CNT ha estado permanentemente en la calle, por
su propia cuenta, lanzando su mensaje a quien haya
querido escucharlo, y dando muestra de su capacidad
de organización y convocatoria.
Y estos en
condiciones adversas. A pesar de las provocaciones e
intimidaciones continuas de la policía, hemos sabido
mantener la calma y llevar adelante los actos
programados.
Toda Sevilla ha
estado tomada por la policía, pero ningún grupo ni
organización ha sufrido un acoso policial como
nosotros.
Por fortuna no
hemos tenido que lamentar detenidos ni incidentes de
gravedad, aunque si hubiesen ocurrido, estábamos
preparados.
CNT de Sevilla