50.000 dólares por senador
Gabriel Fernández
Para derogar
la llamada Ley de Subversión Económica los diputados nacionales que se
sumaron a la iniciativa oficial recibieron un "incentivo" de 30.000 dólares.
Los senadores que pocas horas atrás siguieron el mismo camino, fueron
beneficiados con 50.000 dólares cada uno. Las sumas fueron receptadas
personalmente poco antes de cada sesión.
Esa es la denuncia formulada ante este
periodista por una fuente segura del Congreso Nacional. La afirmación fue
realizada a pocas cuadras del edificio legislativo, mientras las pantallas
televisivas mostraban los resultados de la votación en la Cámara Alta y los
manifestantes insultaban, desde las veredas cercanas, a los representantes
congregados para la reunión del jueves 30 de mayo.
El informante, quien solicitó
encarecidamente el resguardo de su identidad, señaló que "no es la primera
ley que se compra, casi todas las leyes importantes salieron con sumas
parecidas a estas". Y ratificó: "Acá nadie vota si no le pagan".
Luego destacó que "la denuncia de la
Banelco era cierta", en alusión a la observación del sindicalista Hugo
Moyano sobre la existencia de coimas para la reformulación del régimen
laboral.
Cuando se lo interrogó sobre el origen del
dinero, expresó: "En este caso, los principales aportantes fueron los
empresarios directamente beneficiados. También hubo aportes de algunas
grandes empresas que consideraron valiosa la anulación de la ley".
Descartó absolutamente la existencia de
preceptos ideológicos o políticos en los legisladores que resolvieron
"sancionar la impunidad": se trata, precisó, "de tipos que sólo votan si se
les paga. A partir de ahí hacen el discurso."
Posteriormente consideró que "las sumas
que se manejan son grandes: si saca la cuenta de lo que cuesta cada ley en
Diputados y Senadores va a entender lo que le digo", y dejó abierta la
posibilidad de que "algunos senadores importantes hayan cobrado, en este
caso, otras sumas directamente de los empresarios beneficiados", pero "eso
tómelo como una posibilidad, porque no me consta directamente".
Pese a que la existencia de "sobres" en el
Congreso es una certeza pública y a que varios legisladores lo admitieron
ante distintos medios de comunicación, esta información es reveladora,
debido a la precisión con que aparece formulada. De hecho, se conoce la
lista de los legisladores que sufragaron por la anulación, y también la
nómina de los empresarios beneficiados por la misma.
"Es suficiente con esto -afirmó la
fuente-; hay más, especialmente sobre los senadores, pero no voy a ir más
lejos. Me basta con que la gente tome las dos listas y sepa quién es quién."
GF/ La Señal
Néstor Miguel Gorojovsky
nestorgoro@fibertel.com.ar
Fuente: Nuestra América