Este modelo de capitalismo neo-liberal de la mayor
ganancia a coste de lo que sea, que beneficia a unos pocos a costa de
muchos, es el que circula por nuestras costas una y otra vez y pasó lo
anunciado: una nueva tragedia económica, medioambiental y humana que
Galiza ya no está en situación de poder asumir. En este momento son más de
8.000 familias las afectadas directamente en su medio de vida pero hay más
de otras 8.000 que verán peligrar su futuro en breve plazo, sin contar con
que ya hay 500 Km de costa en veda para la pesca.
La pesca y el marisqueo en nuestro país da trabajo a
muchos miles de trabajadores y trabajadoras (marineros, mariscadoras,
compradores, vendedores, transportistas...) y es uno de los sectores base
de nuestra economía, su hundimiento nos hunde a tod@s. Hay que tener en
cuenta, además, que una parte importante de los productos de la pesca y
marisqueo no pasa por lonja y no figura en las cifras oficiales lo que
aumenta el número de trabajadores y trabajadoras que se verán afectados .
Se habla estos días de las empresas armadoras que
cobran el seguro de la carga aunque esta esté en el fondo del mar y que
muchas hunden sus propios barcos para cobrar estos seguros millonarios.
Esta verdad se lleva practicando desde hace ya muchos años y hasta ahora
nadie ha dicho nada. Los piratas del mar tienen muchas caras: armadores,
empresas petrolíferas, Estados, compañías aseguradoras y un largo etcétera
que es difícil de deshacer porque agarra a todas las partes afectadas y
ninguna dice ni pío.
El transporte de crudo y substancias peligrosas pasa
cerca de nuestras costas desde hace años, y es más, entran en las rías,
causando o provocando verdaderos desastres medioambientales. La polémica
de si los barcos tienen o no que llevar doble casco es anecdótica. Si
pasan miles de barcos al lado de la costa, con un casco o dos, alguno
acaba reventando e inundándonos con su mierda. Es una simple cuestión
estadística y de números.
Esta vez el desastre medioambiental y humano es muy
costoso y no sabemos que pasará en los próximos días y meses. Los arenales
y las rías son el medio de vida de miles de trabajadores y trabajadoras
que ya están hartos de aguantar desastres. La "Costa da morte" es aún hoy
la zona de más emigración de Galiza, todos los años miles de jóvenes van a
trabajar temporalmente a Canarias, Baleares o a cualquier lugar de Europa
o del mundo y ahora otros miles se sumarán a esta catástrofe humana que es
la emigración. Si las rías son difíciles de limpiar imaginar las rocas
donde se cría el percebe : rocas batidas por el mar, de difícil acceso.
Se puede tardar años en recuperar el percebe y algunos
menos para la almeja, el berberecho o el mejillón. La pesca de bajura está
parada en una franja de 500 km de costa y el delegado del gobierno dice
que tenemos mucha costa y que no hay marea negra, sólo manchas dispersas.
Los pájaros marinos (cormoranes, alcatraces) que pasan
(o viven) por aquí en sus migraciones y anidan en las lagunas cercanas a
la costa están muriendo a cientos y puede que el Arao desaparezca para
siempre del litoral (había muy pocas parejas localizadas en Malpica y las
Sisargas). El fuel se hunde en las arenas y para poderlo sacar hay que
destaparlo primero y los fondos marinos cubiertos de alquitrán.
Fraga cazando y los ministros implicados mintiendo y
volviendo a mentir, las televisiones y la prensa desinformando. El
gobierno del estado minimizando las consecuencias de un desastre que se
podía haber evitado: no hay marea negra y por supuesto tampoco declaración
de zona catastrófica. No va a haber un barco por si acaso sucede un
accidente dice el conselleiro de pesca.
La prepotencia y el desprecio tanto del gobierno galego
como el central fue patente durante todos estos días no queriendo ayuda de
otros estados porque todo estaba controlado, y el control llega a tal
eficacia que Muxia se cubre por tres veces de fuel. La descoordinación, la
falta de criterios técnicos, la ausencia de toma de decisiones por parte
de los políticos fue total, hasta los técnicos holandeses denunciaron que
no habían hablado con ningún técnico sólo con políticos.
Pero a pesar del desastre, una parte de los
trabajadores y trabajadoras del mar y de la población costera tiene miedo
a hablar en alto, el caciquismo político está enraizado y los fascistas
del PP campan por sus anchas en nuestras vilas y son amos y señores de
haciendas, no en vano habló Fraga en Camariñas : "outros veñen con
palavras, eu traio diñeiro no peto". y reparto de esas ayudas, ¿cómo? y ¿
a quién?, están en juego y no se tiene la fuerza suficiente para gritar en
alto y exigir soluciones ya, porque debemos ser todos los trabajadores y
trabajadoras de Galiza los que gritemos con ell@s.
Desde la Federación Galaica de CNT, como parte de la
"Plataforma cidadá NUNCA MAIS" se exigen una serie de medidas que se
resumen en cuatro puntos.
1. Declaración de Galiza como zona catastrófica
alcanzando a todos los sectores relacionados directa o indirectamente.
2. Puesta en marcha de mecanismos de prevención en toda
la costa y restauración medioambiental total con la dotación económica
necesaria.
3. Adopción de medidas por parte del gobierno del
Estado y de la Xunta de Galiza para que hechos como estos no se vuelvan
repetir: control del tráfico marítimo, estado de los buques, dispositivos
de salvamento, lucha contra la contaminación marina, impedir el traslado
por nuestras rías de mercancías peligrosas.
4. Dimisión de toda la cadena de inútiles responsables
políticos: ministros, delegado del gobierno, conselleiros y Presidente da
Xunta.
El domingo día 1 de diciembre habrá una gran
manifestación en Santiago de Compostela, saldrá a las 12 de la mañana de
la Alameda y acabará en el Obradoiro. Desde la Federación Galaica de la
CNT hacemos un llamamiento para que os unáis a nosotros y que salga de tod@s
nosotr@s la rabia y la fuerza que tiene el pueblo trabajador.