, esta
frase extraída de una canción era, por desgracia, la que se me venía
continuamente a la cabeza el 5 de agosto, día de resaca del último
atentado de la banda nacionalista ETA.
Partiendo de la base de que el nacionalismo es fascismo,
sin excepción vasco o español, me produce una indignación parecida los
hechos acontecidos en Santa Pola el día 4, como la panda de aprovechados
políticos que con sus instintos de carroñeros peregrinaron a la ciudad
alicantina para sacar provecho de los recientes cadáveres en defensa de
las sacrosantas Unidad, Libertad (palabras que desvirtúan con el solo
hecho de utilizar) y Grandeza de España. Era curioso ver cómo la primera
imagen que emitían los telediarios era un Aznar que había encontrado por
fin la excusa perfecta para ilegalizar Batasuna, y lo decía así a las
claras y usando el lenguaje de su antecesor directo, Francisco Franco:
Esta gente (siquiera se refería a los terroristas sino a Batasuna) no
puede campar libremente mientras los españoles seguimos enterrando
víctimas. Y tras esto el resto de sinvergüenzas (PSOE, jueces...)
repitiendo el mismo discurso nacional-demagógico.
Mientras oportunista tras oportunista se aprovecha del
vacío mediático veraniego en el que ahora competían casi monográficamente
los atentados con las millonarias aventuras del futbolista Ronaldo, a mí,
que permanecía en mi puesto de trabajo, se me ocurrió hacer un pequeño
comentario, expresando mi opinión sobre la actitud de la clase política
para con este tipo de tristemente llamativos eventos y de su pasividad
para con otros problemas que se me antojan más importante como es el hecho
de que cada día perezcan unos cinco obreros en sus puestos de trabajo o la
precariedad laboral cada día más patente en mi sector, la hostelería (cabe
recordar que incluso para los entendidos hoy se considera el motor
económico del país). Sencillamente por esto fui acusado inmediatamente de
pro-terrorista o directamente de terrorista. Más aún cuando intenté
convencer a mis compañeros de trabajo de que no sólo el nacionalismo vasco
o supuesto nacionalismo vasco (hoy ETA es más una banda mafiosa conectada
con el tráfico de armas que una banda nacionalista) es terrorista y que
también se torturaba en locales en cuya fachada se puede leer Todo por
la Patria acompañada de la rojigualda, también matan
en nombre de la unidad todos esos grupúsculos de cerebros rapados bandera
española en ristre, también bajo esta todos sufrimos la friolera de
cuarenta años de dictadura fascista del Pater político de los que hoy
enarbolan las libertades de esta podrida y mal llamada democracia. De nada
sirvió como ya dijo en su día su líder en última instancia George Bush
o conmigo o contra mí, y no ven más allá, y no, no son grandes
empresarios podridos en su dinero y beneficiados por el régimen, son gente
del pueblo, gente como yo, gente que se levanta todas las mañanas a
realizar su trabajo de catorce horas ni siquiera bien remuneradas y que
están a expensas de que vengan muchos turistas a veranear para poder
conservar su puesto de trabajo y que aún así tragan la mierda de que la
prensa del régimen les da de comer, porque todo va bien, todo va bien.
Pero ahora la discusión termina, parece que el Real Madrid finalmente ha
fichado a Ronaldo.
Tenemos muchos enemigos pero el más grande de todos es
la ignorancia.
Francisco Riofrío