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La C.N.T. regresa a Ibiza

 

Compañeras y compañeros anarcosindicalistas, un fraternal saludo desde esta pequeña isla de Ibiza, situada en el entorno insular de la Islas Baleares que seguro conocéis por el "sol y playa" que tanto se han esmerado en difundir las multinacionales del engaño especulador. Pero también existe otra tierra entrañable y arraigada, donde nosotros hemos nacido, y donde también existe la explotación. De esta forma voy a intentar acercaros a nuestra realidad social a través de una breve crónica y expondré la trayectoria de nuestro empeño por rescatar la lucha libertaria en el entorno isleño.

SITUACIÓN SOCIOECONÓMICA Y LABORAL

El P.I.B. de las Islas Baleares es con creces el más elevado del Estado español, tan solo provincias como Madrid, Cataluña y País Vasco se aproximan con distancia a nuestra renta per cápita. El turismo es con diferencia, desde los años sesenta, la principal y más importante fuente de riqueza del archipiélago, y las actividades turísticas han proporcionado un nivel de desarrollo económico sin precedentes en el territorio insular. El número de turismos y teléfonos móviles por habitante es el mayor de Europa, concretamente en la isla de Ibiza (541 km2) y Formentera (82 km2) está registrado más de un vehículo por persona en un territorio que tranquilamente puede ser recorrido en bicicleta de un extremo al otro en una jornada. Actualmente existen en la Baleares trece campos de golf, a pesar de la escasez cada vez más insostenible de agua potable, y nuestros puertos se encuentran en la actualidad completamente saturados de yates de lujo y embarcaciones de recreo. La promoción turística de los mayoristas de viajes en los últimos tiempos se han esforzado además en dirigir su voraz atención hacia los colectivos de alto estanding y bits.

Pero a pesar de las cifras, las cosas en Ibiza y Formentera no resultan ni de lejos lo que las apariencias pretenden mostrar. La construcción masiva de inmuebles dedicados a la actividad turística ha ocasionado graves problemas ambientales y paisajísticos, especialmente importantes en las zonas del litoral, y la situación laboral presenta una particular situación de gran precariedad como consecuencia de la estacionalidad (casi 8.000 fijos discontinuos el año pasado en Ibiza) y la marginación social.

Resulta paradójico que, a pesar de que en las Baleares el índice de pobreza es relativamente moderado, presenta una tasa preocupante en lo que se refiere a los grupos de población que padecen pobreza extrema, es decir, personas que viven de forma cotidiana con deficiencias graves o muy graves. Este colectivo representa un 18% dentro del total de pobreza, mientras que en el resto del territorio español el porcentaje no supera el 14,1%.

Merecen especial atención los cambios sufridos en la dinámica demográfica y la población pitiusa de estos últimos tiempos. Las islas han experimentado un fuerte crecimiento como consecuencia del incremento de la tasa de natalidad de los años 1955 a 1975, junto a una caída progresiva de la mortalidad y la llegada masiva de inmigrantes atraídos por las ofertas de trabajo derivadas de las actividades turísticas, en unas islas que hasta mediados de siglo habían sido tradicionalmente tierra de emigrantes. Esta fuerte inmigración exterior, ya en el año 1991 suponía el 42% de la población total y desde entonces no ha hecho más que aumentar. Tanto es así, que la población en la isla de Ibiza ha pasado de 37.000 habitantes en 1965 a más de 90.000 en la actualidad, acelerado crecimiento provocado por la afluencia de inmigración procedente tanto de otras provincias del Estado español como del extranjero, que suelen ser gente joven que viene a trabajar en el sector servicios y en especial en hostelería, empresarios en busca de ampliación de mercado y profesionales liberales, especialmente en relación con la administración. Este hecho convierte a Ibiza en la isla más densamente poblada del archipiélago después de Mallorca. La conjunción de todos estos factores ha provocado que, en la actualidad, se pueda hablar de un auténtico crecimiento explosivo de la población, que ha provocado también cambios importantes en la organización territorial. Por un lado, el crecimiento que ha experimentado la ciudad de Ibiza la ha convertido en el segundo núcleo urbano en peso demográfico de las Islas Baleares, después de Palma, y ha favorecido un desarrollo urbanístico estrepitosamente ilimitado y caótico. Por otro lado, la explotación turística ha provocado la desmesurada proliferación de urbanizaciones en las zonas litorales y la construcción masiva en las zonas rurales, sin ningún tipo de planificación, de viviendas unifamiliares residenciales (básicamente como residencias de fin de semana o temporales), además de la expansión de los núcleos urbanos consolidados. Las consecuencias directas han sido una inmediata degradación de unos espacios naturales ya irrecuperables, y el aumento espectacular del precio de la vivienda, completamente inaccesible para la mayor parte de la población.

En lo que respecta a los sectores de producción, hay que resaltar el predominio absoluto de la población ocupada que se dedica a las actividades del sector terciario, debido al desarrollo turístico. En cambio, el sector primario ha experimentado una absoluta recesión y en la actualidad ocupa tan solo el 2,3 % de la población activa. Las tierras cultivadas ocupan el 53% del territorio total de la Baleares y un 90% estas tierras se dedican a la agricultura de secano, además la ganadería y la pesca en las Pitiusas se reduce a pequeñas empresas de tipo familiar, dedicadas en su mayoría al suministro de restaurantes locales o al abastecimiento de productos autóctonos a pequeños comercios. El sector secundario, que ocupa entorno al 22% de la población activa, ha experimentado la expansión de determinadas industrias relacionadas directamente con los servicios turísticos y, sobre todo, las actividades relacionadas con la construcción, que representa el 47% de la ocupación total del sector.

En todos los sectores, y especialmente en la hostelería, el comercio y el transporte, se trabaja a destajo y, en demasiadas ocasiones, sin parar ni un solo día durante los seis meses que dura la temporada turística a cambio del riesgo que ello supone para la salud y un plus miserable en el sueldo ya de por sí insuficiente. No por un hecho casual Baleares presenta el índice de siniestralidad laboral más elevado del Estado español, y en las Pitiusas además con el beneplácito de la administración puesto que las inspecciones de trabajo han brillado desde siempre por su ausencia.

Los residentes isleños, además de tener que soportar unos sueldos que no se corresponden ni de lejos con el nivel de vida, se ven obligados a comprar los productos de primera necesidad un 40% más caros que en el resto de la Península, y el hecho de la insularidad contribuye de forma evidente al enriquecimiento de las grandes compañías de transporte marítimo y aéreo, puesto que el descuento ridículo e insuficiente por residencia hace que el precio de los billetes resulte desmesurado y, por tanto, inaccesible para muchas familias, que no se pueden permitir la movilidad que desearían y acaban padeciendo aislamiento e incomunicación.

En lo que respecta a la educación, las inversiones en el sector no se han correspondido en absoluto con el aumento de población y las islas presentan en la actualidad graves deficiencias de dotaciones materiales e infraestructura, con lo cual todos los centros educativos presentan una preocupante masificación. Resulta elocuente que las Baleares en la actualidad presenten el índice de abandono escolar en los niveles de ESO y Bachillerato más elevado del Estado español. Problemática en la que hay que tener en cuenta aspectos muy diversos, empezando por el estado de semiabandono que padece nuestra población más joven como consecuencia de los horarios laborales indiscriminados que tienen que soportar sus padres y los sueldos miserables que provocan que ni trabajando ambos miembros de la familia se consiga llegar a final de mes. Asimismo, la situación laboral del profesorado no resulta mucho más halagüeña, dado el elevado índice de interinidad, especialmente importante en la Pitiusas que según los centros puede encontrarse entre un 60% y un 90% del total de la plantilla, y que ha generado una grave situación de inestabilidad y precariedad. Además, hay que tener en cuenta las condiciones de degradación que han de soportar tanto alumnos como el profesorado ante el hecho del engaño social que supone una reforma educativa que ha pretendido aplicar sin los mínimos recursos materiales y humanos imprescindibles una atención a la diversidad, lo cual ha generado deficiencias muy graves en la convivencia y la función docente.

Como habéis podido comprobar, un panorama desalentador, que no nos amedrenta sino al contrario, nos provoca reflexión crítica y nos alienta en la necesidad de tomar partido desde el compromiso en la lucha por una vida mejor.

NACE EL ATENEU LLIBERTARI PITIÚS "LA TRANQUIL·LITAT"

Nuestra historia empieza hace poco más de dos años cuando fuimos coincidiendo compañeros de ideas y de luchas libertarias, que no se improvisan de un día para otro sino que se maduran con el tiempo, y sentíamos ese calor que no da el sol de esta isla, soñando vivir en anarquía como utopía de espíritu que embriaga, sin necesidad de emborracharnos más que de libertad.

En la isla se encontraba desde hace más de treinta años el compañero "Kinoto", artesano como Kropotkin, llegado desde el exilio forzado de su tierra natal argentina, infatigable lector voraz de nuestros grandes filósofos que alimentan su inspiración y que ha encaminado su vida en el compromiso y la lucha contra la injusticia social.

También llegaron a la isla procedentes de Gerona los compañeros Luisa y Martín, con ya una experiencia como militantes anarcosindicalistas y que habían hecho posible junto a otros compañeros la fundación del Sindicato en La Bisbal.

Y yo, que en esta tierra que me ha visto nacer he sufrido junto a los campos de almendros y olivos, viéndolos desaparecer hundidos bajo toneladas de cemento especulador. Muy pronto desperté del sueño de una realidad ficticia creada por el orden del capital, que en mi propia carne se convirtió en pesadilla bajo yugo de esclavitud impuesta por mi condición de mujer y por un jornal de sol a sol en el que dejé mi infancia perdida. De esta manera aprendí rápido a luchar, desde el lado de los oprimidos porque ahí es donde se encuentra siempre la verdad. Pronto aprendí también a odiar la sumisión de un pueblo acobardado, capaz de soportar la vejación más inimaginable bajo el miedo impuesto por la opresión caciquil. Porque en esta tierra los poderosos se han recreado en su propia podredumbre ante los ojos del aburguesamiento generalizado y el silencio sepulcral impuesto por la hipócrita moral eclesiástica. Es más, durante demasiado tiempo, y aún hoy, la educación ha estado en manos de la clericalla, que bien ha sabido aprovechar el instrumento para lentamente hundir a este pueblo, en un tiempo valiente y luchador, bajo la superficialidad de una moral hipócrita y materialista que con banal egoísmo entierra todo espíritu de solidaridad. Pero también existe una parte de este pueblo que hemos sentido el asco y la cólera por la injusticia social, generada por el falso privilegio de la riqueza acumulada y las leyes que siempre han protegido y siguen protegiendo estos privilegios en una sociedad clasista y alienante.

Rompiendo mis propias cadenas, des de que tengo uso de razón me he ganado a pulso el derecho a sentirme mujer libre y como militante de pensamiento ácrata en todo momento he visto la necesidad de profundizar en nuestras ideas libertarias. Así, como historiadora he ido formando mi propia biblioteca y con el tiempo he madurado escribiendo mis propios trabajos. Entre los que tengo que recordar de forma entrañable mi estudio sobre la vida de Ramón Acín (publicado por la Editorial Virus). También, desde mi regreso a la isla, he asumido como propia la tarea de trabajar en el rescate de la trayectoria de la C.N.T. en las Pitiusas y en este sentido continuo desarrollando mi labor.

Reunidos en asamblea fue en diciembre del año 2000 cuando acordamos la creación del Ateneu Llibertari Pitiús "La Tranquil·litat", ante la incipiente necesidad e inquietud que todos compartimos por rescatar del olvido nuestro propio legado libertario. El nombre que adoptamos pretendía revivir el espíritu del legendario local del barrio de Pueblo Seco en Barcelona, que ya en 1911 era punto de encuentro y debate entre los anarquistas, y que fue el cuartel general del la CNT y del grupo "Nosotros" antes y durante la Revolución del 36, y allí se reunieron Emma Goldman, Francisco Ferrer, Durruti y tantos otros. Por tanto, el nombre de "La Tranquilidad" no podía hacer referencia más que a la "tranquilidad de conciencia", concepto siempre presente en el espíritu anarquista.

Entonces inspiramos al dibujante Bellvi de Barcelona, que se prestó de inmediato a realizar varios modelos para nuestro logotipo, entre los que optamos por una imagen en la que aparece un tintero caído y la tinta negra vertida formando la silueta de las islas de Ibiza y Formentera, enmarcado por una circunferencia en negro en la que aparece impreso en blanco el nombre de nuestro ateneo.

Desde que empezamos a andar nuestros primeros pasos, nos hemos coordinado para llevar adelante diversos proyectos, entre los que se encuentran:

el estudio de la cultura libertaria y la investigación de la memoria histórica de las Pitiusas, a través de consulta en archivos, bibliografías y entrevistas con los compañeros de las islas que vivieron la revolución del 36;

la formación de una biblioteca con publicaciones periódicas, libros, vídeos y trabajos sobre anarquismo;

Presencia todos los viernes del año en la Plaza del Parque de la ciudad de Ibiza a través de una mesa con material de la CNT, del Ateneu Estel Negre de Palma, de la Fundación Anselmo Lorenzo, del colectivo K.E.@., de la Editorial Virus y de la distribuidora Atak de Barcelona;

Presencia en la jornada anual del día del Libro.

Publicación periódica del boletín "La Tranquil·litat", que es la voz del ateneo e intenta difundir información sobre nuestra historia libertaria, además de temas de actualidad, contrainformación y recoger los asuntos que más nos preocupan y más nos han indignado desde las Pitiusas;

Actuaciones puntuales como la redacción de un manifiesto y la convocatoria de concentraciones contra la guerra, como respuesta a la violencia y manipulación de la información que se está llevando a cabo a raíz de los hechos del 11 de septiembre;

Taller de cerámica dirigido a los niños dentro de la "V Trobada d’Escoles" de Ibiza;

También hemos empezado a trabajar en la organización de charlas y proyección de vídeos, quedando como proyectos de futuro la organización de exposiciones, jornadas y excursiones.

"La Tranquil·litat" -que no ha sido nada tranquilo tal como era la intención desde un principio-, pretende ser al mismo tiempo un lugar donde compartir conocimientos y un lugar de encuentro para la denuncia y la lucha social, sobretodo a nivel insular, donde nuestro principal objetivo es la difusión de la cultura libertaria y la acción directa. En nuestro tiempo la información ha quedado reducida al mero entretenimiento alienante y a la publicidad y la cultura se ha convertido en un simple espectáculo. El siglo XX nació bajo el signo de la revolución y ha muerto enterrado por la desesperación que dicta la cultura de consumo, la desmotivación y la falta de compromiso, que domestica haciendo creer que las cosas pasan porque sí y que además son inalterables. Nosotros, desde el ateneo, hemos asumido la responsabilidad y el derecho de representar y difundir el pasado libertario, que nos pertenece y nos niegan, para construir un presente más libre y autocrítico, sin autoritarismos, desigualdades sociales, discriminaciones y opresiones de ningún tipo, en una nueva sociedad más constructiva, solidaria y respetuosa con el entorno natural. Somos conscientes que, especialmente en estos momentos, cambiar el mundo es muy difícil pero nuestro deber es intentar mejorarlo.

A pesar de que en estos momentos el ateneo no dispone de una sede social, en los años que llevamos trabajando nuestro espacio se ha ido convirtiendo en un referente y un punto de encuentro para todo aquel que se ha querido acercar al pensamiento ácrata y a los compañeros que a lo largo del tiempo han ido pasando por nuestra mesa. Y... seguimos adelante.

LA CNT CAMINA DE NUEVO

El pasado mes de abril, ante la proximidad del primero de mayo surgió de nuevo entre los miembros del Ateneu Llibertari Pitiús el deseo de participar en el evento, como protesta dado que en nuestra cotidianidad padecemos el estado de degradación laboral en que se encuentran nuestras islas. Desde su origen en el ateneo se había planteado la posibilidad de la creación de una organización sindical, pero para que esto fuera posible y siempre como militantes anarquistas, debían aparecer refuerzos con la experiencia necesaria y al mismo tiempo que compartiesen con entusiasmo nuestras inquietudes.

Como anarcosindicalistas teníamos también el deber y la responsabilidad de intentar restablecer y reparar la deuda histórica de la CNT en Ibiza y hemos compartido siempre la ilusión de que algún día esto fuera posible.

Los esperados refuerzos llegaron como un ciclón de la mano de la F.L. de Palma, quienes con su visita nos animaron en nuestro empeño y nos ofrecieron todo su apoyo. Y como un vendaval de aire fresco llegó a la isla el compañero Jose Antonio "Cansaliebres", nieto del histórico cenetista Juan Martínez García, más duro que las piedras que trabaja, quien haciendo temblar nuestra poltrona cultural-libertaria y con la fuerza de convicción que caracteriza los firmes principios ácratas se ha convertido en ejemplo inagotable de acción sindical.

También contactamos gracias a las actividades del ateneo con el compañero Alejandro, procedente de la F.L. de Granada donde militaron él y su compañera Covadonga (que conocen bien los redactores de cnt), quienes representan nuestro modelo de organización, como fuente de conocimiento e integridad militante.

Eramos perfectamente conscientes de la responsabilidad que nos correspondía. De las prolongadas y enriquecedoras asambleas que desde entonces se fueron sucediendo surgió la posibilidad de fundación del S.O.V. de Ibiza y Formentera, y desde entonces no paramos de trabajar.

Rápidamente se sumaron a nuestros esfuerzos los compañeros de Cádiz, Pirri, Guille y La Negra, jóvenes comprometidos que con su vitalidad ácrata y profunda convicción levantan lo que haga falta.

Desde las primeras asambleas se planteó también la cuestión de la pervivencia del ateneo y la convivencia entre el ateneo y el Sindicato, quedando definitivamente resuelto que el ateneo seguirá desempeñando la labor que ha venido desarrollando hasta el momento, y la convivencia con el Sindicato se llevará adelante en la forma del apoyo mutuo. Así, se tomó la resolución conjunta de celebrar y manifestarnos el 1º de Mayo, con todas sus consecuencias, para darnos a conocer y estar presentes en Ibiza como militantes de la CNT.

NUESTRO PRIMER 1º DE MAYO

Nuestra primera actuación pública y colectiva como miembros de la CNT fue la presencia en la manifestación del pasado primero de Mayo de Ibiza, por primera vez desde 1936.

La jornada anterior se procedió a la pegada de carteles del sindicato, que nos había facilitado la F.L. de Palma, y también otros carteles realizados por nosotros mismos que contenían frases alusivas, como "El Estado también explota", "Capitalismo y fascismo todo es lo mismo", "Basta de tortura y falsedad democrática" y "El mundo gasta un millón de dólares cada día en armamento". A pesar de la tensión que acompaña siempre este tipo de actuaciones, compartimos esos momentos con gran optimismo y decisión. Así, unos por la experiencia y otros por la altura, fuimos colocando nuestros carteles en los lugares más inaccesibles hasta terminar nuestro último pasquín y empapelando todo el recorrido de la manifestación en la ciudad, cosa inaudita en la isla puesto que el resto de sindicatos desde siempre (al menos que yo recuerde) tan sólo se han molestado en presentar una "institucional" pancarta alusiva.

Al día siguiente, ante los ojos incrédulos de unos y asustados de otros, nos fuimos reuniendo puntualmente en el punto de encuentro situado al final de la concentración, a parte y marcando intencionadamente las distancias respecto a los miembros oficialistas de UGT y CCOO que habían convocado la manifestación. Y nos hicimos notar: en todo el recorrido no dejó de sonar el tambor que tocaban nuestros jóvenes, relució el color rojo y negro de nuestras banderas, y la pancarta que en todo momento nos encabezó se hizo notar como correspondía, acompañada sin cesar por megafonía con nuestras reivindicaciones, voces contra el Estado y la canción "A las Barricadas". Ellos habían reunido un par de cientos y nosotros un par de docenas, pero la atención se centró en nuestra presencia y la cámaras de prensa y TV estuvieron enfocando en todo momento hacia nosotros. Aunque -como ya esperábamos puesto que la actuación llevada a cabo no se prestaba a sensacionalismos- al día siguiente no nos dedicaron más que un par de líneas en la prensa local.

La manifestación concluyó como estaba previsto en el Paseo de s’Alamera, donde los sindicatos mayoritarios se esmeraban en preparar una paella "pagada por el Estado" y se apresuraban en leer unos insulsos mítines, desde la tarima situada frente al monumento del General Vara de Rey, centrados casi exclusivamente en la ley para el desempleo que prepara el gobierno central y en la "Ecotasa" que se ha empezado a cobrar al turismo de las Islas Baleares. Nosotros, plantamos la pancarta y nuestras banderas en las espaldas del "General" y, a pesar de que nos intentaron boicotear subiendo el volumen de la música, nos animamos a presentar con ayuda del megáfono nuestro mitin. Primero intervino el compañero Alejandro, quien procedió a la presentación del Sindicato y posteriormente insistió en que él no iba a hablar de la "Ecotasa", sino de la situación real y de los problemas con los que se tienen que enfrentar diariamente los trabajadores de estas islas. Recordando a los mártires de Chicago, que murieron por la reivindicación de las 8 horas, señaló que ésta es todavía hoy una reivindicación vigente en la isla, donde los trabajadores se ven forzados a hacer jornadas interminables sin descansos, firmando contratos basura en las mínimas categorías profesionales, obligados a desempeñar cualquier tipo de función laboral... En definitiva, padeciendo una penosa situación laboral de la cual son responsables directos los sindicatos mayoritarios vendidos a través de las subvenciones, y ocupados exclusivamente en el politiqueo y en pactar convenios con la patronal que nada tienen que ver con la realidad laboral de las islas. Para concluir diciendo que, a partir de estos momentos, el S.O.V. de Ibiza y Formentera, perteneciente a la Federación Regional de Cataluña y Baleares de la CNT, ha llegado para situarse del lado de los trabajadores y trabajadoras, no en los "Comités", sino apoyándoles en su lucha con la acción directa.

A continuación intervine yo misma recordando, en catalán puesto que como ibicenca es mi lengua materna y para dejar bien claro que nuestra lucha se sitúa en el entorno isleño, que los obreros juzgados y ejecutados el primero de mayo de 1887 eran anarquistas y que este hecho fue el origen de que a partir de 1890 se venga celebrando la festividad del trabajo. También intervine pidiendo que no se haga de la historia un olvido, hoy más que nunca los trabajadores deben organizarse y luchar por su dignidad. Hay que luchar contra las condiciones de precariedad laboral que se dan hoy en la isla de Ibiza –horas extras no pagadas, incumplimiento de las normas básicas de sanidad y seguridad, contratación precaria, sueldos miserables, maltratos,...- que en definitiva suponen las mismas condiciones de explotación capitalista generalizada en las que nos hallamos inmersos en el mundo actual. De aquí la necesidad de organizarse y luchar por nuestra dignidad des de una postura íntegra y coherente como la que siempre ha representado históricamente y representa hoy el sindicato de la CNT, y ahora por fin también como instrumento de lucha en esta tierra castigada a lo largo del tiempo por la sumisión, la ignorancia y el fascismo.

Habíamos despertado interés y la gente se arremolinaba a nuestro alrededor escuchando con atención y asintiendo a nuestras palabras. Finalizada nuestra intervención, muchas personas se acercaron con entusiasmo a felicitarnos, compartiendo con nosotros la felicidad de haber dado por fin este gran paso en Ibiza, donde a partir de ahora cada cual será puesto en su lugar. Sirva este acto como revulsivo para que nuestros trabajadores y trabajadores tomen consciencia y se pongan en marcha.

FUNDACIÓ DEL S.O.V. D’EIVISSA I FORMENTERA

El referente histórico inmediato con el que podemos contar hasta el momento respecto a la trayectoria de la CNT en las Pitiusas empieza con una primera organización anarcosindicalista el año 1930 como "Sindicato de Oficios Varios", con sede social en el pueblo de San Francisco Javier de Formentera, ubicado en el edificio de la antigua Casa Consistorial en la Plaza de la Constitución, que ya contaba con 230 afiliados. En la isla de Ibiza la CNT quedó constituida en septiembre de 1931 como "Sindicato Único del Ramo de Transportes de Ibiza y Formentera", con local social en la calle Obispo Cardona, número 10, en la ciudad de Ibiza. La última referencia nos llega del 10 de noviembre de 1936 publicada en el "Boletín Oficial de la Provincia de Baleares", donde figura como asociación obrera "adherida o simpatizante del Frente Popular" el "Sindicato Único de Oficios Varios de Ibiza", con sede social en la calle Obispo Cardona, número 41, de la ciudad de Ibiza; y el "Sindicato de Oficios Varios de Formentera", de San Francisco Javier. A partir de 1936, y a raíz de las depuraciones de la guerra y el exilio, queda definitivamente borrado todo rastro de la organización sindical cenetista en las islas Pitiusas.

Hasta que en este año, después de casi setenta años de silencio, decidimos que había que iniciar los trámites para la legalización del S.O.V. de Ibiza y Formentera, adherido a la Federación Local de Palma y formando parte del Comité Regional de Cataluña y Baleares. Así, habiéndonos asesorado desde la Secretaria General del Comité Regional, procedimos a la entrega del Acta de Constitución y los Estatutos en la correspondiente Delegación Territorial de Trabajo, ante los ojos de incredulidad y sorpresa del funcionariado del SOIB.

A partir de estos momentos, nos espera un largo camino que día a día se va a ir recorriendo con intenso trabajo y dedicación, empezando por el reparto de responsabilidades entre las que me ha tocado asumir la Secretaria General, compromiso que espero desarrollar como corresponde con el apoyo de los compañeros y compañeras. También tenemos que empezar a hacer eco de nuestra presencia en los medios de comunicación y a preparar campañas de difusión para presentar nuestras ideas, a través de la convocatoria de asambleas, en los principales centros de trabajo de las islas. Otro de nuestros inminentes campos de batalla va a ser sin duda la reivindicación del patrimonio histórico que, sino surge efecto por la vía oficial, si es necesario utilizaremos la estrategia y practicaremos la acción directa para recuperar lo que es nuestro, haciendo valer nuestros derechos.

Y hasta aquí nuestra historia... Tan solo pedimos fervientemente que os pongáis en contacto con nosotros si conocéis datos que puedan ser de interés para nuestra organización isleña. Asimismo, esperamos recibir todo el apoyo material que podáis facilitarnos, puesto que partimos de cero y, en todo caso, agradecemos de antemano vuestra atención.

Compañeras y compañeros, la cooperación es la mejor preparación para la destrucción del capitalismo, como miembros de la Confederación Regional de Cataluña y Baleares luchamos para llevar adelante con dignidad nuestra labor y, como no podía ser de otra manera, os ofrecemos nuestra incondicional colaboración, esperando vuestro apoyo fraternal más que nunca en estos momentos iniciales.

Salud y Anarquía

S.O.V. d’Eivissa i Formentera

Apartat de Correus 746, 07820 Sant Antoni Eivissa (Illes Balears) Tel. 616 10 90 95

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