Hemos argumentado que este abandono de los sistemas de protección aérea no podía haber ocurrido sin la implicación de funcionarios superiores. Hemos nombrado a George Walker Bush, Donald Rumsfeld y al general Richard B. Myers.

¿Por qué estos tres hombres?

La autoridad en las fuerzas armadas de los EE.UU. emana de la posición que ocupa una persona en la cadena de mando militar. El presidente y el secretario de Defensa son los dos cargos máximos en la cadena de mando militar. El jefe de la Junta de Comandantes de Estado Mayor forma parte de la cadena de comunicaciones y puede recibir responsabilidades específicas por parte del presidente y/o del secretario de Defensa. El 11 de septiembre, George Bush era el presidente. Donald Rumsfeld, el secretario de Defensa. Y el general Richard B. Myers, el jefe de la Junta de Comandantes de Estado Mayor.

Estos tres hombres tenían ese día responsabilidades decisivas en la protección de Nueva York y Washington. Según la información públicamente disponible, no cumplieron con su deber.

Su comportamiento, tal como se ha descrito en los medios de comunicación, presenta una apariencia de estupefacción, ingenuidad y falta de preparación. Pero demostraremos que esta apariencia fue fabricada. Empezaremos por la cúpula de la cadena de mandos. George Walker Bus.

El 11 de septiembre, el presidente Bush estaba en Sarasota, Florida, en su segundo día de un viaje de dos días. Los planes de Bush para ese día eran públicamente conocidos con anticipación.

Mucha gente está confundida en relación a qué sabía esa mañana el presidente Bush y cuándo lo supo.

La razón de esta confusión es que, más tarde, Ari Fleisher, secretario de prensa de Bush; Richard Cheney, su vicepresidente, y el presidente Bush mismo dieron versiones contradictorias de lo que este último hizo esa mañana.

Afortunadamente, hubo gente de los periódicos y la televisión que estuvieron con el presidente Bush en Florida el 11 de septiembre. Sus informaciones de primera mano trazan un cuadro claro.

En esta sección del Sumario de Evidencias:

a) estableceremos lo que sabían Bush y su equipo antes de entrar en el aula de la Escuela Booker, y b) consideraremos algunas implicaciones.

En secciones venideras examinaremos la visita concreta de Bush a la Escuela Booker y su posterior partida esa mañana desde el Aeropuerto Internacional de Sarasota-Bradenton, en Florida. También examinaremos las historias encubridoras lanzadas más tarde por Fleisher, Cheney y el propio presidente Bush.

Bush supo de la primera colisión antes de entrar en la Escuela Booker Sonya Ross, cronista de la Associated Press, era una de los periodistas que cubrían el viaje de Bush a Florida en la mañana del 11 de septiembre. La señorita Ross, o bien estaba de camino a la Escuela Booker, o bien ya estaba allí cuando se enteró de la primera colisión contra el WTC:

«Mi teléfono móvil sonó cuando la caravana del presidente Bush se dirigía hacia la escuela primaria Emma E. Booker, de Sarasota, Florida. Un colega me informó de que un avión se había estrellado contra el World Trade Center de Nueva York. No me pudo dar más información.

«Llamé a la oficina de la AP en Washington en busca de detalles. Allí me encontré con la misma información escasa. Pero yo sabía que había tenido que ser horrible. Busqué algún funcionario de la Casa Blanca para preguntarle, pero no hubo ninguno a mano hasta las nueve y cinco de la mañana». AP, 12 de septiembre. La señorita Ross "buscó algún funcionario de la Casa Blanca" porque sabía que la gente de Bush le informaría mejor que la Associated Press.

Bush viaja con un poderoso estado mayor El presidente Bush no es una persona ordinaria. Viaja con un personal de apoyo completo. Los miembros del mismo son responsables de la recepción, el filtrado y la transmisión de la información administrativa y militar. El jefe de este equipo, Andrew Card, organiza y coordina a sus miembros y se comunica con el presidente. Además, Bush dispone del Servicio Secreto, que es responsable de su seguridad.

Los miembros de este grupo de apoyo poseen el mejor equipo de comunicaciones del mundo. Mantienen contacto, o pueden establecerlo rápidamente, con el gabinete de Bush, el Centro de Mando Militar Nacional (NMCC, por sus siglas en inglés) del Pentágono, la Administración Federal de Aviación (FAA) y los agentes del Servicio Secreto que han quedado a la zaga en la Casa Blanca, etc.

Puesto que la señorita Ross conoce la primera colisión contra el WTC mientras la caravana de Bush se acerca a la Escuela Booker, el sentido común dicta que el señor Bush la conoció antes y la conoció mejor.

John Cochran, periodista de la ABC, viajaba con el presidente. Sobre este asunto informó durante la mañana del martes por ABC TV: «Peter, como sabes, el presidente está en Florida hablando sobre educación. Salió de la suite de su hotel esta mañana, y cuando se disponía a marcharse, los periodistas vieron al jefe de personal de la casa Blanca, Andy Card, susurrarle algo al oído. Uno de ellos le preguntó al presidente: "¿Se ha enterado de lo que está sucediendo en Nueva York?" Dijo que sí, y agregó que algo haría al respecto más tarde. Su primera actividad consiste en una visita de alrededor de media hora a una escuela primaria de Sarasota, Florida.» Informe Especial del "ABC News".

Por lo tanto, Bush sabía del primer incidente del WTC antes de abandonar su hotel. ¿Qué más sabía?

1.John Cochran informa que el presidente Bush no respondió a Andrew Card. Es inconcebible que una persona viva escuche que un avión acaba de incrustarse en el edificio más grande de Nueva York y no tenga ninguna respuesta que dar. Por lo tanto, Bush tiene que haberlo sabido antes de que Card le susurrara al oído.

2.Esto es confirmado por el hecho de que poco después de que Card le hablara, Bush le dijo a un periodista que haría una declaración más tarde. Bush no habría dicho esto sin antes analizar la situación con su jefe de equipo y otros.

¿Sabía Bush que la colisión contra el WTC era un ataque terrorista? Esta pregunta es respondida por algo que el vicepresidente Richard Cheney reveló, probablemente de manera inconsciente, en MEET THE PRESS el domingo 16 de septiembre.

Incluso sin la información de John Cochran en ABC, el comentario de Cheney constituye la prueba de que antes de que el presidente Bush fuese a la Escuela Booker sabía que un avión había sido secuestrado y luego estrellado contra el WTC.

Cheney conversó con el periodista Tim Russert, de MEET THE PRESS, sobre el trayecto del vuelo 77 de la American Airlines, que impactó contra el Pentágono. He aquí el diálogo:

«VICEPR. CHENEY: ... Lo más que puedo decir es que se dirigía [el vuelo 77] inicialmente hacia la Casa Blanca y...

«RUSSERT: ¿Realmente el avión circunvoló la Casa Blanca?

«VICEPR. CHENEY: No la circunvoló, pero se dirigía hacia ella. El Servicio Secreto tiene un acuerdo con la F.A.A. Estaban en comunicación permanente después de que el World Trade Center fuera...

«RUSSERT: Lo seguían por radar.

«VICEPR. CHENEY: Y cuando entró en la zona peligrosa y parecía que apuntaba a la Casa Blanca fue cuando me cogieron y me evacuaron al sótano... (Etc.)»

MEET THE PRESS Transcript.

Parece como que Cheney hubiese revelado abruptamente el hecho crucial de que el Servicio Secreto estaba en comunicación permanente con la FAA, luego comprendió que estaba hablando demasiado y se detuvo antes de completar la frase. Pero si en realidad habló demasiado, también se paró demasiado tarde. Resulta obvio que la frase debía haber acabado con la palabra «impactado» u otra similar. Así: «El Servicio Secreto tiene un acuerdo con la F.A.A. Estaban en comunicación permanente después de que el World Trade Center fuera impactado.»

El Servicio Secreto tiene una conexión especial con la FAA, con el fin de poder acceder rápidamente a información relevante para la seguridad del presidente. Después del primer ataque contra el WTC, la conexión entre la FAA y el Servicio Secreto fue elevada al nivel de comunicación permanente.

(De una manera similar, las órdenes emitidas por la FAA y la Junta de Jefes de Estado Mayor exigen unos contactos intensificados entre la FAA y el Centro de Mando Militar Nacional (NMCC) en caso de secuestro. Véase "Guilty for 9-11, Section 2: Cheney´s Cover Story" [Culpables del 11 de septiembre, Sección 2: La historia encubridora de Cheney]).

Por consiguiente, en el momento en que el vuelo 11 de la American se estrellaba contra el World Trade Center, alrededor de las 8:46, y muy probablemente antes de que esto ocurriera, el Servicio Secreto sabía lo que sabía la FAA.

¿Pero qué sabía la FAA?

La FAA admite que a las 8:20 "sospechaba" que el vuelo 11 de la American había sido objeto de un secuestro. (7) Y de acuerdo con la historia oficial lanzada el 14 de septiembre:

"8:40 [la] FAA notifica al NEADS (Sector de Defensa Aérea del Nordeste, por sus siglas en inglés) del NORAD, el sistema militar de protección civil, sobre el vuelo 11 [esto es, que había sido secuestrado]" Newsday, 23 de septiembre de 2001.

En consecuencia, sobre la base de la historia oficial, el Servicio Secreto sabía hacia las 8:40 o antes que el vuelo 11 había sido secuestrado. Y puesto que la FAA estaba siguiendo el vuelo 11, al igual que el Centro de Mando Militar Nacional, que es notificado de los secuestros y tiene acceso a los radares de todo el país, está claro que a las 8:46 el Servicio Secreto sabía que un avión secuestrado se había estrellado contra el World Trade Center.

Así, de acuerdo con la historia oficial, antes de que el presidente entrara en la Escuela Booker, de hecho, antes presumiblemente de que abandonara su hotel, el Servicio Secreto sabía que, por primera vez en la historia de los EE.UU., el país había sido atacado desde el aire por terroristas.

El Servicio Secreto, que emplea a más de 4.000 personas, tiene varias responsabilidades. La más importante es proteger al presidente. Y con seguridad, esto significa mantenerlo alejado de peligros innecesarios, porque mejor es prevenir que curar. Esto es especialmente cierto en caso de determinados peligros:

Durante la Guerra Fría, cuando los agentes de seguridad solían jugar a juegos de guerra que incluían amenazas terroristas contra la Casa Blanca, el único problema insoluble era un avión comercial cargado con explosivos que hacía como que aterrizaba en el Aeropuerto Nacional de Washington, y entonces se desviaba para un ataque suicida contra la Casa Blanca» (TIME Magazine). De manera que, desde hace mucho, el Servicio Secreto ha sabido que uno de los desafíos a la seguridad más difíciles de afrontar es el que plantea un ataque suicida desde un avión comercial secuestrado en un aeropuerto próximo.

La Escuela Booker se encuentra a menos de 8 kilómetros del Aeropuerto Internacional de Sarasota-Bradenton. Consiguientemente, durante un día en que estaban siendo secuestrados unos aviones para atacar edificios desde distintos aeropuertos, la precaución de seguridad más obvia era mantener al presidente alejado de una reunión anunciada públicamente en un edificio cercano a un aeropuerto.

Esto es hasta dónde sabemos:

1) Antes de que el presidente Bush abandonara su hotel, el Servicio Secreto conocía que un avión secuestrado se había estrellado contra el World Trade Center, un edificio que simbolizaba el poder de los EE.UU.

2) El presidente es el blanco individual más obvio de un ataque terrorista.

3) La agenda del presidente incluía una visita esa mañana a la Escuela Booker. Esta visita carecía de toda importancia, o sea que se la podía cancelar fácilmente. La agenda era conocida públicamente, incluida la hora en que pronunciaría un discurso en la escuela -9:30.

4) Aceptando que la historia oficial fue enteramente verdadera, existía toda la razón para creer que un terrorista había lanzado un avión contra el WTC. Por lo tanto un terrorista podía estrellar, desde luego, un avión contra la Escuela Booker para matar a Bush - evidentemente, una victoria mucho mayor que tirar abajo el WTC. Este peligro aumentaba por la proximidad de un aeropuerto.

Además, si el ataque contra el WTC señalaba el comienzo de un ataque terrorista más amplio, era ciertamente posible que terroristas fuertemente armados atacasen la Escuela Booker desde tierra.

He aquí la cuestión candente Dada la obligación del Servicio Secreto de proteger al presidente.

Dada la comunicación permanente del Servicio Secreto con la FAA y en consecuencia su conocimiento de que un avión había sido secuestrado y a continuación estrellado contra el World Trade Center;

Dada la potencial amenaza de muerte para el presidente Bush si éste hacía acto de presencia en un lugar público, según se había programado y había sido anunciado el día anterior y era conocido por todos en la región...

Existe una sola explicación para el hecho de que el Servicio Secreto permitiera al presidente Bush afrontar el riesgo mortal de concurrir a la Escuela Booker en la mañana del 11 de septiembre.

George Walker Bush conocía los planes para el 11 de septiembre. Y porque conocía tales planes, sabía que nadie iba a atacar la Escuela Booker.

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