El conflicto
colectivo en el ámbito del derecho laboral es el planteado entre los
trabajadores y el empresario (persona física o jurídica). En estos conflictos,
como en el conjunto del derecho laboral, se recogen una serie de ventajas para
la parte más débil: los trabajadores. Pero esto es apenas significativo y
estos derechos cada vez son más recortados con las continuas reformas o, mejor
dicho, retrocesos laborales. Pero no era este el tema que queríamos tratar,
sino otro conflicto (bélico) colectivo que implica a la mayoría de los estados
(capital, política, ejército y religión), que no hay que confundir con
pueblos (masa más o menos homogénea de personas unidas por lazos culturales,
étnicos, etc., y que sufre a los elementos que dominan los estados y
constituyen los efectos colaterales de las guerras, crisis económicas y demás
efectos perniciosos de los sueños de grandeza de los políticos ). Este
conflicto en cuestión enfrenta al mundo contra el terrorismo internacional y
cuenta con el respaldo de la mayoría de los países y de sus ciudadanos por lo
que parece, pues las protestas son mínimas y de grupos pequeños. Y es que esta
guerra viene precedida de m atentado que justifica todo lo que está ocurriendo.
El mal se concentra en un país : Afganistán donde da la coincidencia que se
refugian los seres más malignos del planeta : los talibanes. Éstos matan,
torturan y no respetan el más mínimo derecho humano y dan cobijo al causante
de los alentados de Nueva York, previamente hallado culpable sin un juicio, como
sería propio de la mayor democracia de la Tierra y cuya persecución implica
invadir países y bombardear ciudades. Pero nosotros "los civilizados"
justificarnos estas acciones y vemos bien que se castiguen a los"
culpables" , pues nos impacta mucho más ver morir en directo a nuestros
iguales que viven en el mundo desarrollado y llevan vidas y costumbres parecidas
a las nuestras y de los cuales hemos hecho propio su estilo de vida que
desarrapados sin nuestro nivel de vida que son cada vez más y cada vez nos caen
peor estos pobres que no se conforman con aparecer en reportajes de televisión
, que nos cortan la digestión momentáneamente, sino que muchos de ellos han
empezado a llegar a nuestros barrios a- crear problemas- y hacer que nuestra
parte del pastel occidental sea más pequeña. Mejor es ir contra ellos porque
empiezan a ser nuestros enemigos. Antes lo fueron los comunistas, tan iguales
ellos y que sirvieron tan bien a la carrera armamentística del planeta. Ahora
desaparecido el peligro rojo, aparece otro enemigo: el Islam, personificado en
gentes fanáticas dispuestas a morir por su dios no escarmientan ni acaban de
ver al verdadero DIO$ Pero enfrente hay algo más que una religión, está la
pobreza y la desesperación que llama a nuestra puerta y pide responsabilidades.
Los alentados se dirigieron contra el centro
económico, militar y político mundial, y en estos alentados también la
población civil sufrió los efectos colaterales y murieron varios miles de
personas, y esas muertes nos conmovieron Pues perfectamente Podíamos imaginar
el sufrimiento de gentes atrapadas en sus oficinas de una gran ciudad
desarrollada, en cambio esa conmoción no nos aflora siempre, y así diariamente
muere mucha gente en el mundo por un terrorismo silencioso pero más letal, que
condena al hambre y la enfermedad a pueblos enteros y es promovido por nuestro
mundo desarrollado y, como partícipes del mismo, guardamos un silencio e
indiferencia cómplices que nos delata.
Volviendo al tema inicial a diferencia del
derecho laboral, que protege formalmente a la parte débil, en este conflicto la
parte débil es machacada, y la parte débil hoy son los talibanes, mañana
serán otros los" terroristas internacionales", como anteriormente lo
fueron los países latinoamericanos que quisieron ser socialistas, o Cuba en un
segundo plano, actualmente, en el capítulo de dictadura terrorista, tal vez
mañana u hoy el enemigo estamos siendo nosotros, los que nos preguntamos el
porqué de estas barbaridades en nombre de la" democracia" y los
"derechos humanos " y no acabamos de compartir los postulados de
nuestro televisor , siempre tan" bien informado" de todo. En fin
nuestras ideas nos empiezan a inquietar y estamos pensando que sería bueno que
nos aplicáramos todos y todas la ley antiterrorista -y permaneciéramos
incomunicad@s durante algún tiempo de los medios de "información",
tal vez así empezaríamos a descubrir la culpabilidad de sus actos y la
inocencia de nuestros pensamientos.
En fin, es un consuelo saber que los pueblos
morirán bombardeados, pero con el estómago lleno de la ayuda humanitaria,
creerán que su viaje al otro mundo fue por la falta de costumbre de comer
tanto.
Estamos convencidos de que otro mundo es
posible, pero tenemos la certeza de que cada vez queda menos tiempo (para todos
y todas).