La letona
Alina, de 16 años, abofeteó con dos claveles la cara del llamado
Carlos de Inglaterra cuando visitaba su país. El gesto pilló por
sorpresa al susodicho, que puso un rostro de pánico total que
contrastaba con las miradas de determinación y desprecio de la
compañera. Alina terminó lanzando las flores a Carlos, (que se cubrió
como si hubiese llegado su última hora), y fue violentamente detenida
por los servicios de seguridad y guardaespaldas del orejones. Alina
declaró que realizó su gesto, "en protesta por la guerra de
Afganistán". ¿Qué cara hubiese puesto Carlos, si le hubiese
caído encima una bomba de las que está tirando su aviación sobre los
pueblos afganos? ¿dónde hubiese lavado sus calzoncillos ese sin vergüenza?
El presidente letón ha asegurado que Alina está loca. Más locura de
esa hace falta en este mundo.
Extraído de Opinión Libertaria