El pasado
25 de octubre tuvo lugar en Zaragoza una huelga estudiantil, que contó
con un 75% de seguimiento según fuentes de la organización convocada
por diversos sindicatos y organizaciones estudiantiles que se arrogan la
representación estudiantil, aunque, como en el caso de la Universidad
de Zaragoza, no vote ni el 10% de los/as estudiantes para el Claustro.
La huelga se llevó a cabo contra
nueva Reforma Educativa que el Gobierno del PP piensa imponer pese al
claro rechazo del sector de la enseñanza, tanto estudiantes como
trabajadores/as, con la consecuencia inmediata de una sobresaturación
de horas lectivas, imponiendo unas asignaturas sobre otras (eso sí las
horas de religión no se rebajan un ápice), retomando la Reválida, o
los exámenes franquistas de recuperación que es lo mismo.
Se crea asimismo la llamada Ley de
Calidad dentro de las Universidades, añadiendo pruebas de selección
para entrar a la Universidad, que incluyen pruebas específicas por
facultad, amén de convertir la enseñanza en más elitista con subidas
de las tasas y créditos.
A mediados de la mañana un grupo de
individualidades libertarias procedieron al "suicidio"
simbólico de un muñeco, que representaba el espíritu estudiantil en
el campus universitario, mientras se repartían octavillas con el texto
todos sois Mª Teresa Campos, además de una octavilla donde se
denunciaba la forma en que se estudia en la Universidad, enfocada a la
pura competitividad y sin contenido. Todo esto sucedió ante la atónita
mirada de todas las personas que pasaban por el campus en esos momentos,
permaneciendo el monigote "ahorcado" durante un buen rato.
Contra esta ley se convocó por parte
del Sindicato de Estudiantes de Izquierdas (SEI) y otras asociaciones
estudiantiles semi-fantasmas, además de UGT y CCOO una manifestación
que salió de la Universidad a las 10 AM para ir incorporando gente
hasta partir de la Glorieta Sasera sobre el mediodía de donde salieron
unas 5000 personas según la organización.
Al final de la mani, que discurrió
con un ambiente de jolgorio general, se situó el cortejo libertario
bajo la pancarta de CNT-Enseñanza y con banderas anarcosindicalistas,
al que se unieron un nutrido grupo de estudiantes. Un grupo de personas
portaba caretas de calavera con una pancarta en la que se leía "la
Universidad ha muerto" y se corearon consignas como "Ni Dios,
ni amo, ni SEI", "Ni Dios, ni amo, ni UGT" y similares,
lo que provocó momentos de tensión con algunos de los convocantes de
la mani, que se mostraron visiblemente contrariados.
Finalmente, cuando la manifestación
llegó a Pza. de España y los representantes de los sindicatos
"mayoritarios" iban a tomar la palabra, un grupo de unas 200
personas se separó de la manifestación con la pancarta
anarcosindicalista y continuó hasta la Pza. del Pilar, plantándose
frente a la Delegación del Gobierno y gritando en todo momento
consignas libertarias y repartiendo panfletos.
Hecho destacable es que la prensa no
hizo más que una leve mención al bloque disidente de la mani oficial.
CNT-Enseñanza