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El histórico combate de los anarquistas contra el racismo Un centenar de anarquistas de una docena de ciudades acudieron el 11 de Septiembre de 1993 a una marcha-encuentro en Chattanooga, Tennessee, para hacer frente a una manifestación anti-gay y pro-policías asesinos planeada por el Ku-Klux-Klan, y protestar por los 23 asesinatos conocidos de negros bajo custodia policial en los últimos veinte años (siete desde 1990); además para exigir la retirada de cargos sobre los 8 de Chattanooga, un grupo de activistas anti- racistas. Este artículo se enmarca en las actividades y hechos históricos que han llevado a anarquistas y grupos de izquierda en EEUU a celebrar el Día Nacional de Acción contra la Brutalidad Policial (22 de octubre). Para comprender Chattanooga es necesario comprender hechos fundamentales concernientes a su Historia, relacionados con nombres como Lookout Mountain, Orchard Knob y Missionary Ridge. En éstos lugares, entre los días 23 y 25 de Noviembre de 1863 -en plena guerra civil en EEUU-, los Confederados lucharon hasta con el último hombre durante la feroz batalla de Chattanooga. Los ejércitos del Norte fueron vencidos y abandonaron Tennessee, dejando vía libre a las tropas del general Sherman para entrar en Georgia, donde redujeron Atlanta a cenizas. A continuación, en su marcha hacia el mar, Sherman devastó todo lo que encontró a su paso en un radio de sesenta millas alrededor. En Abril de 1864, éstas y otras batallas acabaron con el poder de los Confederados en el profundo sur. Muchos blancos no olvidaron y, desde luego, nunca perdonaron. Esta es una ciudad en la que muchos de sus alcaldes han sido miembros reconocidos del KKK, y en la que, como en el resto de los EEUU, la guerra civil nunca ha terminado. Entre sus batallas modernas se halla un levantamiento ocurrido en 1971 a causa de la brutalidad policial. Duró diez días, y sólo pudo ser sofocado con la colaboración de miles de efectivos del ejército y la Guardia Nacional. En 1980, una facción del Klan fue tachada de blanda por atrever a reunirse con la Asociación Nacional por el Progreso de la Gente de Color (Association for the Advancement of Coloured People). ¿La solución? Para probar su disposición a la lucha, condujeron un vehículo por un barrio negro, disparando y asesinando a cinco personas por la espalda. Cuando el jurado los absolvió, los negros iniciaron una revuelta que en una semana creció hasta el punto de formar una milicia que logró mantener a la policía fuera de la zona. Tras esto, el KKK se refugió en la clandestinidad. Aún hoy, aguardan un nuevo despertar. Para conocer cómo y por qué anarquistas negros han asumido semejante reto se hace necesaria una vuelta a los años sesenta, así como cierta revisión de los antecedentes de esta región. Revolucionarios negros sitiados al este y al oeste Ciudadanos de Chattanooga Preocupados por la Justicia (CCCF - Chattanooga's Concerned Citizens for Justice), uno de los grupos que convocó la protesta, está liderado por Lorenzo Komboa Ervin. Algunos anarquistas viejos reconocerán su nombre como el del autor del panfleto escrito en 1979 titulado Anarquismo y la Revolución Negra (Anarchism and the Black Revolution). Aquellos que estén familiarizados con la escena anarquista en EEUU sabrán que se trata de un movimiento casi exclusivamente blanco, por lo que la presencia de Lorenzo supone un avance notable. Las raíces radicales de Lorenzo se remontan a sus días en Chattanooga como organizador del Comité Coordinador de Estudiantes no-Violentos (Student Non-Violent Coordinating Committee - SNCC), así como del Partido de los Panteras Negras. A continuación del asesinato de M. Luther King en 1967, Chattanooga ardió lentamente junto con infinidad de otras ciudades que a lo largo de los EEUU estaban siendo barridas por las revueltas insurreccionales negras. Lorenzo se encontraba en Atlanta durante el levantamiento de Chattanooga. Pero el gobierno de la ciudad tenía la intención de capturarle. (Está documentado que durante éste periodo el gobierno pretendió destruir el SNCC y el Partido de los Panteras Negras, resultando estos diezmados por múltiples asesinatos y encerronas). En 1968, un así llamado tribunal del "Black Power" (creado para juzgar delitos a este respecto) fue reunido para decidir sobre la imputación de Lorenzo bien por posesión ilícita de armas, o bien por tenencia de explosivos, a raíz de una revuelta de la que ni siquiera se hallaba geográficamente cerca. Se trató, pues, de un descarado intento de encerrarle por medio de maquinaciones ilegítimas. Y puesto que Lorenzo se encontraba fuera del Estado durante la sesión del tribunal, fue también acusado de realizar un vuelo ilegal en ese periodo. Un amigo de la niñez perteneciente a la policía local confió a Lorenzo que, de ir a parar a la cárcel, no saldría con vida, pues estaba siendo objetivo de un complot para acabar con su vida. Después de pasar por Cuba, Guinea y Checoslovaquia, en un momento dado, Lorenzo aparece en Berlín Este, donde gozó de la protección de un grupo de estudiantes africanos. De cualquier modo, a finales de 1969, agentes de los EEUU capturaron a Lorenzo, para trasladarlo secretamente hasta Berlín Oeste, desde donde fue custodiado hasta los USA y subsiguientemente detenido. En 1971 fue encarcelado hasta 1983. Mientras estuvo en prisión, la reflexión sobre su experiencia con el comunismo lo alejó de las tesis filo-Marxista-Leninistas seguidas por los Panteras, conduciéndose hacia tendencias anarquistas. Anarquistas combaten el racismo blanco De cualquier modo, la reciente experiencia de Lorenzo en el trabajo con militantes anarquistas de raza blanca en la Alianza multi-temática por la Justicia de Chattanooga (Chattanooga's multi-issue Justice Alliance) lo ha llevado a reabrirse al movimiento anarquista. Tras enviar en Abril del 93 una carta de apoyo al periódico anarquista Love and Rage (Amor y Rabia), que expresaba a su vez solidaridad con la Workers Solidarity Alliance (WSA, un grupo de trabajadores y activistas anarquistas), la WSA, Love and Rage y Neither East nor West-NYC (NENW-NYC, que promueven estructuras de trabajo en red entre movimientos de oposición alternativos en el Este y el Oeste) entablaron un diálogo con Lorenzo. Este solicitó ayuda para los 8 de Chattanooga, un grupo de manifestantes detenidos el 13 de Mayo a raíz de una protesta contra la "policía asesina" ante un acto de conmemoración de la misma. Esto se llevó a cabo justo dos días después que un gran jurado hubiera rehusado a establecer cargos contra 8 policías blancos, implicados en la muerte por estrangulamiento de un camionero negro, Larry Powell. Se fijó una fianza para los 8 de $ 1000 por perturbar la paz e interferir en un acto público. Para entonces se supo que los Caballeros de Lookout Mountains del Ku Klux Klan habían solicitado permiso para llevar a cabo una reunión el día 11 de Septiembre. Su reivindicación exigía que no se volviera a celebrar otra marcha por el Orgullo Gay como la celebrada en Junio, y apoyaba a los agentes que asesinaron a L. Powell. Así, la Chattanooga's Justice Alliance and Concerned Citizens for Justice corrió la voz para que anarquistas, grupos pro-derechos civiles y colectivos de gays y lesbianas ayudaran a organizar una movilización nacional para confrontar al Klan el 11 de Septiembre. El día 10 de Septiembre, grupos e individuos afines o representativos de la izquierda -alrededor de 10 asociaciones diferentes- provenientes de lo largo y ancho de EEUU comenzaron a reunirse en Chattanooga. Nadie sabía bien qué pensar a medida que se extendía el rumor de que el Klan se había echado atrás, retirando la solicitud cursada para celebrar su encuentro. La mayoría de los manifestantes estaban listos para pelear si era necesario, pero a medida que llegamos al centro de reunión de Miller Park, en el centro de Chattanooga, se hizo patente que el día nos pertenecía. No sólo no había rastro del Klan, sino que tampoco se veía policía alguna. Sin permiso legal, unas 100 personas, mayormente anarquistas, marcharon a través del centro de la ciudad, tomando la calle con banderas negras a la cabeza y con sólo dos coches patrulla siguiendo de lejos a la comitiva; finalmente se agruparon frente al edificio del Tribunal de Justicia sin incidentes. Ocupamos la escalinata, bloqueando la entrada al edificio; Lorenzo tomo un micro para anunciar que su grupo llamaba al boicot en Chattanooga hasta que el asunto del policía asesino fuera tratado adecuadamente. Hubo incluso un momento divertido cuando un coche de policía encubierto pasó lentamente, filmando y fotografiando hasta que un manifestante comenzó a seguirlos bloqueando su campo visual con una bandera rojinegra anarco-sindicalista. Fue un momento en el que todos reímos y celebramos la broma. El resto de la tarde se pasó, de nuevo en Miller Park, entre el concierto de Rock Against Racism y la comida gratuita de Food Not Bombs. Más tarde se celebró una reunión para discutir y trabajar sobre futuros planes. Tratándose de una ciudad turística, aparentemente se quería evitar cualquier problema, y fue bastante desconcertante ver a un colorido grupo de chicos blancos uniéndose para protestar contra el racismo. Los medios desplegaron gran cantidad de publicidad previa al evento, así como una completa cobertura al acabar éste. Chattanooga no había vivido semejante afluencia blanca a una manifestación de protesta desde 1987. En conversaciones con Lorenzo, se reveló un desolador panorama en relación con la comunidad negra local, que se hallaba considerablemente intimidada, asistiendo a la marcha sólo un puñado de líderes y representantes de entre esta. Aquellos que se abstuvieron de participar temían ser incluidos en algún tipo de lista negra, renunciando a labores de seguridad y demás. La comunidad negra local se encontraba sola y aislada, en un clima donde los problemas raciales son considerados "cosas de negros". Así pues, la idea era que se necesitaría de la presencia de individuos blancos para modificar el terreno de debate y mostrar a las autoridades de Chattanooga que se estaba siguiendo el evento a nivel nacional. Aunque la afluencia fue pequeña, fue un punto de inflexión para los colectivos anarquistas, teniendo en cuenta que se movilizó a gente de todo el ámbito nacional en coordinación con grupos negros alrededor de un evento antirracista. Los 8 de Chattanooga fueron: Lorenzo Komboa Ervin, John Johnson, Tanya Miles, Steven Hunter, Rhonda Robinson, Clifford Eberhardt, Keith Melvin, and Charlotte Williams. Traducido del inglés por Phil O'Mennow |