l 3 de
abril de 2003, la esposa de un preso, que se encuentra en el centro de
exterminio de Almería (El Acebuche), se puso en contacto con la madre de
otro preso y compañero del anterior para comunicarle que a su esposo lo
han trasladado a un centro de exterminio en Zaragoza (Brutal
dispersión).
La realidad vuelve a mostrarse
bastante dura, ya no sólo por la cabronada de alejarlo aun más de su
lugar de origen (Málaga), sino porque la situación económica de esta
familia no le permite a la esposa poder visitarlo, y todo lo que ello
conlleva de soledad, tristeza, aislamiento... Todo esto viene acompañado
por una serie de acontecimientos que, una vez más, joden al preso y
vuelve a demostrar lo inhumanos y criminales de mierda que son los
carceleros. Se le negó a este compañero preso el poder visitar a su
madre horas antes de su muerte en el Hospital de Carlos Haya, en Málaga,
algo que la propia madre solicitó antes de morir. Tras la muerte de ésta
le obligaron a deshacerse de una cadena de oro con un crucifijo que le
regaló su madre a este preso, medida arbitraria y muestra de su terrible
crueldad... Ante esto, y las amenazas de torturas que sufrió este preso,
la única alternativa que le quedó a este hombre fue tragarse la cadena y
el crucifijo (era el único recuerdo que le quedaba de su madre muerta a
la que negaron ver a su hijo por última vez). Durante este hecho fue
amenazado con proporcionarle palizas, y se le llevó a la enfermería para
darle laxante...
No sabemos más... Pero el problema es
el sistema en el que estos asesinos, torturadores y dictadores inhumanos
tienen cabida...
Cruz Negra Anarkista