Después de cuatro años de explotación extrema, un buen día un grupo de estos trabajadores deciden pasarse por el local de la CNT en Sevilla, para organizarse y plantarle cara a la empresa y al Consistorio. La CNT de Sevilla se vuelca con ellos, y poco a poco se van añadiendo más trabajadores, hasta acabar afiliada la totalidad de la plantilla. Se decide pedir una reunión con los responsables del Ayuntamiento. Nos reciben el dos de enero, y pasadas dos semanas el Consistorio anuncia que va a rescindir la subcontrata de PILSA, "debido a que la empresa niega los derechos de los trabajadores". Desde entonces los acontecimientos se precipitan a un ritmo vertiginoso.

El Consistorio y la empresa ven que los trabajadores están organizados y se ponen nerviosos. Intentan amedrentarlos y desunirlos con todo tipo de amenazas y chantajes. Nuestros compañeros ven peligrar su puesto de trabajo e intentan negociar unas condiciones mínimas. La respuesta que reciben es la siguiente: se niegan en rotundo a negociar nada con CNT, y que de negociar algo tendría que ser a través del comité de empresa (CCOO y UGT).

Les ofrecen a unos una cosa, a otros otra, y el resto que esperen en una bolsa de trabajo. Y añaden: "tenéis dos caminos, aceptar nuestra palabra (sin firmar ningún acuerdo por escrito) o seguís en la CNT y que la CNT os dé de comer".

Pedimos vuestro apoyo en lo que sea posible, con llamadas y faxes de solidaridad al Ayuntamiento de Tomares Tf. 954 159 210 Fax: 954 15 38 54

No podemos permitirnos perder esta batalla. Está en juego que esta lucha sirva como modelo a much@s trabajador@s, como l@s de Tomares, que en pleno siglo XXI sufren la explotación y las amenazas más propias de un régimen dictatorial y fascista que el de un sistema "democrático". Ha llegado la hora de hacernos oír ¿Quién hablaba de campañas contra el empleo precario? ¿Estáis dispuestos a dejar pasar esta ocasión?

Por último, se ha creado un fondo para sufragar los gastos de la huelga, quienes quieran solidarizarse con los compañeros pueden hacer un ingreso de apoyo económico al conflicto en el número de cuenta: 3183 - 4100 - 17 - 000214194

Para que no cobren comisiones hacer ingreso en Banco Santander.

Desde hace cuatro años, con la subcontrata de PILSA, hemos recogido la basura y limpiado las calles de Tomares sometidos a una explotación extrema, tercermundista: con contratos fraudulentos o sin ellos, con salarios de miseria (80.000 ptas/mes), obligados a echar horas extras sin cobrarlas, con jornadas de cincuenta horas semanales o más, sin cumplir ni convenios ni estatuto de los trabajadores, sin derechos sociales, sin los camiones y las herramientas que harían falta, etc.

Y el Ayuntamiento (que ya entonces cedió ilegalmente cinco de sus trabajadores a la empresa subcontratada) lo sabía, y los sindicatos del comité de empresa lo sabían, y los grupos políticos municipales lo sabían, pero nadie movió nunca, durante esos cuatro años, un dedo por nosotros.

Pero, qué curioso, cuando por fin nos organizamos, constituimos una sección sindical propia (en la CNT), todos se han puesto nerviosos: PILSA, primero intentó amedrentarnos con sanciones, y después, ante el temor de verse obligada a cumplir la normativa laboral, quiere rescindir el contrato con el Ayuntamiento, y no duda en intentar utilizarnos como medio de presión contra el Consistorio.

El Ayuntamiento (del PSOE-IU), para lavarse la cara, y de paso no pagar los millones que le debe a PILSA, también quiere rescatar el servicio, pero sin nosotros, claro. Por eso nos promete el oro y el moro mientras que nos coloca delante la baja voluntaria para que firmemos y perdamos todos nuestros derechos. Por eso nos amenaza con no volver a tener trabajo en la vida, y nos recuerda que tenemos familia. Eso sí, del sindicato de la CNT, o de abogados, no quieren oir hablar, que es más fácil engañarnos si estamos solos, divididos.

Durante todo este tiempo, ni una palabra, ni una buena acción, y de repente el comité de empresa (CCOO y UGT) y el equipo de gobierno del ayuntamiento (PSOE-IU) nos han querido mucho de toda la vida, y nos aconsejan que nos estemos quietecitos. Pero no se han dado cuenta todavía que ya no permitiremos que nos atropellen, no permitiremos que vulneren nuestros derechos ni que nos olviden ¡nunca más!

Por esto es por lo que pedimos a los ciudadanos de Tomares vuestra comprensión y solidaridad, agradeciéndolo de antemano.