background image
cnt
n°296 diciembre 2003
Actualidad
1
122
De Chicago a Salónica
Por Iñaki Astoreka. La historia se repite o continúa, como queramos pensar. Habría que remontarse a tiempos inmemoriales
para hacer un análisis exhaustivo de cuándo, por qué y de qué medios se ha dotado el Estado, bien para vituperar o para tratar
de destruir algo que le era molesto a él o a los poderes que los sustentan (económico, político, militar, eclesiástico). Este
enunciado de poderes, podría calificarse por parte de alguno como decimonónico, ya que se podría afirmar que la sociedad ha
cambiado desde 1886, fecha en que comenzaremos este artículo. Sin embargo no es así, hoy en día todo se ha refinado, se ha
mutado como un camaleón, pero ciertamente estos poderes siguen existiendo, aunque su orden de influencia se haya alterado.
Chicago 1886
E
n plena efervescencia por la consecución
de la jornada de ocho horas de trabajo,
se celebra un mitin el 5 de mayo en la
Plaza Haymarket. Al acabar su intervención
Fielden, uno de los oradores, aparece la poli-
cía fuertemente armada y a continuación, al-
guien arroja una bomba, produciéndose una
gran masacre entre los efectos del artefacto y
los disparos de la policía.
El resultado, cuatro anarquistas ahorcados.
Su culpa el poner en solfa a la sociedad capi-
talista, burguesa y "patriótica" de los EE.UU.
Y por reivindicar una sociedad mas justa.
Ferrer i Guardia, fusilado en Mont-
juic el 13 de Octubre de 1909
F
undador de la Escuela Moderna, un pro-
yecto educativo que puso en práctica en
1901 y cuyo objetivo, aparte de aportar
innovaciones en los métodos de enseñanza, era
el de neutralizar la tendencia de la Iglesia ha-
cia el control de la educación pública. Esto
explica que la escuela propugnada por Ferrer
no solo fuese recibida favorablemente en los
sectores anarquistas, sino en otros, principal-
mente republicanos ya que abogaba por una
educación basada en la evolución real y psi-
cológica del niño, individualizada, y también
en la ayuda mutua entre otros matices.
Fue a raíz de la bomba lanzada por el anar-
quista Mateo Morral contra Alfonso XIII, acu-
sado y puesto en libertad después de pasar
un año en la cárcel. Esta acusación provocó
tanto en España como fuera de ella fuertes
protestas, contra el argumento exhibido por
sus acusadores, básicamente la derecha auto-
ritaria y conservadora. Decían que la Escuela
Moderna era un centro de propaganda anar-
quista y por lo tanto Ferrer estaba implicado
en el atentado.
De lo que no se pudo librar es de la acu-
sación de promover la Semana Trágica de Bar-
celona. Los sectores conservadores consiguen
al fin su objetivo. Ferrer i Guardia fue conde-
nado a muerte tras un turbio consejo de gue-
rra. Nunca se demostró su culpabilidad. Su
muerte interesaba a la derecha ultramontana
y al estamento militar. Una vez más los po-
deres dominantes ahogaban un proyecto de so-
ciedad mejor.
Sacco y Vanzetti. Muertos en la silla
eléctrica el 27 de agosto de 1927
E
l año 1921 eran condenados a muerte por
asesinato, a pesar de la inconsistencia de
las pruebas y lo contradictorio de nume-
rosos testigos. Esta sentencia hizo que en todo
el mundo surgiesen movimientos de protesta,
ya que estaba claro que eran condenados por
su carácter de militantes anarquistas y su con-
dición de extranjeros. Intelectuales como Al-
bert Einstein, Máximo Gorki, Beltrand Russel
y otros se sumaron a estas movilizaciones. En-
tretanto prosiguieron las apelaciones y en el
año 1925, Madeiros, un recluso condenado a
muerte por otros asesinatos, exculpó con su de-
claración a Saccco y Vanzetti. Todo fue en vano.
Cincuenta años mas tarde en agosto de
1977, Dukakis, Gobernador de Massachussetts,
reconocía los errores cometidos en el juicio y
afirmaba la inocencia de los dos anarquistas
y rehabilitaba su memoria. Demasiado tarde.
La Ley de Fugas, 1921
Salvador Seguí
E
sta consistía en que un preso, pongamos
el ejemplo de los militantes cenetistas,
era puesto en libertad, sacado de la cár-
cel donde se hallaba, y ya fuera era acribilla-
do a balazos, bien por la policía o por pistoleros
a sueldo, so pretexto de que se había intenta-
do escapar. Así cayeron Evelio Boal, Secretario
de la CNT y sus dos compañeros, Feliu y Do-
mínguez. Otros fueron asesinados de diferen-
te manera como Salvador Seguí, muerto a tiros
por pistoleros de la patronal (consultar el li-
bro de José Peirats Los anarquistas en la crisis
política española).
Casas Viejas 1933. Se declara el
"comunismo libertario"
E
l objetivo, poder roturar y trabajar los
latifundios de la zona. La represión lle-
vada a cabo por la Guardia Civil y la de
Asalto, fue atroz: Francisco Cruz "Seisdedos"
de 70 años de edad y su familia, son bom-
bardeados, ametrallados y quemados vivos en
su propia vivienda ( una choza de barro y ra-
mas). Sobre las brasas serán fusilados dieciséis
campesinos elegidos al azar entre los del pue-
blo. Cita del escritor Ramón J. Sender "Viaje
a la Aldea del Crimen".
Campo de tiro de Paterna, 24 de
julio de 1942
Juan Peiró
E
s fusilado Juan Peiró, brillante cenetis-
ta. Extraditado de Francia por la Gesta-
po y la policía francesa a petición de
Franco, fue cruelmente maltratado ofrecién-
dole sin embargo la libertad a cambio de co-
laborar con los sindicatos franquistas. Su
negativa le costó la muerte.
Delgado y Granados
P
asados por el garrote vil el 17 de agos-
to de 1983, diecisiete días después de
su detención. Fueron sometidos a tor-
turas y se enfrentaron a un Consejo de Gue-
rra carente de la mas mínima garantía ya que
el abogado de los acusados ni siquiera lo era.
Nuevamente los hilos de la represión se co-
braron dos nuevas víctimas. Ciertamente eran
inocentes. Después de casi treinta años, la
TVE-2, emitió un documental sobre el caso. Los
autores del mismo requirieron la presencia de
Fraga Iribarne para comentar estos hechos,
sin embargo esto no fue posible según afir-
maron los redactores del programa. Contaron
con el testimonio sobrecogedor de uno de los
jueces y de militares de la época, revelando por
fin la sordidez criminal de la parodia del jui-
cio. En el año de su muerte Escarpit escribía,
en "Le Monde", "Granados y Delgado han dado
la vida por algo, los verdugos los han ejecu-
tado por nada".
Giuseppe Pinelli
E
l 15 de diciembre de 1969, "se arroja des-
de un cuarto piso" de la Comisaría Cen-
tral de Milán donde era "interrogado" en
relación a los atentados contra la Estación
Central y el Banco de la Agricultura, hechos
imputados a un grupo anarquista de Valpre-
da con los que Pinelli mantenía relación. Da-
rio Fo en 1970, reflejó los hechos en su obre
Muerte accidental de un anarquista.
Las contradicciones sobre su muerte en el
intento de aclarar los hechos fueron conti-
nuas, pese a ello el juez decidió sobreseer el
sumario. Posteriormente se procede a los jui-
cios-farsa a militantes de izquierda de Val-
preda. Mueren en "accidente" cinco
anarquistas testigos de cargo, un abogado fa-
llece al "caer" de un hospital... vamos, un cú-
mulo de desgracias, valga la ironía.
Caso Scala en Barcelona
E
l 15 de enero de 1978, ardía la sala de
espectáculos Scala poco después de una
manifestación convocada por la CNT en
protesta por los Pactos de la Moncloa.
En un principio se imputó el caso al GRA-
PO, pero casi inmediatamente un segundo co-
municado hacía responsable del mismo a la
 OTROS_NÚMEROS PORTADA 01 02 03 04 05 06 07 08 09 10 11 12 13 14 15 16-17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32