Miles de
personas, más de diez mil según la organización, «okuparon» el sabado 23
de marzo las calles de Gasteiz para exigir al alcalde del PP, Alfonso
Alonso, que permita el desarrollo del movimiento socio-cultural que
tiene su sede en el Gaztetxe, la llamada «casa de la colina». Quienes se
agolpaban en las aceras para contemplar el paso de la manifestación
coincidían en señalar que en muchos años no habían visto una marcha tan
concurrida en la ciudad.
Pasadas las siete de la tarde, un grupo
de duendes, zancudos y mimos animaban el centro cívico Iparralde. Todavía
nadie sabía qué iba a pasar, pero en el ambiente se palpaba el nerviosismo
de los organizadores.
La gente, inquieta, no se atrevió a
zambullirse en la manifestación hasta que un gran dragón dio comienzo a la
marcha bajo el lema «Gaztetxearen alde. Aniztasunaren alde. Okupemos la
calle». Haciendo honor al lema, y en pocos segundos, miles de
gasteiztarras «okuparon» la calzada, dejando a un lado las aceras.
Eslóganes diversos «Alonso, idiota, el
gaztetxe no se toca», «con este Ayuntamiento vamos de culo» empezaron a
surgir de las gargantas de jóvenes, mayores y niños; la manifestación iba
tomando forma de fiesta, sin dejar a un lado las reivindicaciones.
La curiosidad creció por momentos, igual
que lo hizo la marcha. Los manifestantes ya no eran unos pocos que se
reunían en el centro cívico Iparralde. Era como si de todas las esquinas
fuera sumándose gente que hacía crecer progresivamente la columna humana.
¡Vaya si creció! Con la calle Paz como referencia, los miembros de la
Gazte Asanblada hicieron un primer balance: No recordaban una marcha igual
desde algún que otro Tres de Marzo. La multitud era fiel reflejo del apoyo
y las adhesiones que el Gaztetxe ha concitado en las últimas semanas.
Convertida la Plaza de la Virgen Blanca en un hervidero de gente, los
rostros de los jóvenes del Gaztetxe eran la imagen de la satisfacción por
el objetivo cumplido.
Después de la manifestación sólo falta
saber qué será del Gaztetxe en el futuro. Entre timbales que impulsaban a
mover el cuerpo y la música en directo de Mikel Urdangarin, uno de los
organizadores respondía sin saber aún qué magnitud estaba cogiendo la
marcha: «Nosotros tenemos claro cuál es nuestro trabajo y lo que llevamos
haciendo durante los últimos trece años. Tenemos ya muchas iniciativas
preparadas y el aniversario del Gaztetxe está a la vuelta de la esquina,
el 28 de abril. Luego vendrán la semana de literatura, la semana de
montaña y otras que tenemos planificadas».
Fuente:Gara
Enviado por Agencia Confederal Bilbao