Sobre Argentina

Los cambios radicales no van a venir de los líderes argentinos. La nacionalización de los bancos y la protección de la industria es todo lo más que pueden ofrecer. Un cambio verdadero en el sistema capitalista que obliga a la gente a vender sus cuerpos para sobrevivir no va a venir de arriba. Los amotinados continuan la rebelión y su organización se hace más eficiente. Sin embargo, muchos todavía aceptan el capitalismo como el modelo básico de la economía. El momento actual, no obstante, contiene una excelente oportunidad para que los comunistas libertarios ayuden a organizar al pueblo para hacer lo que el gobierno no puede hacer bajo el sistema capitalista -- satisfacer las necesidades básicas sin sacrificar la libertad, la paz y la dignidad humana.

A pesar de las dificultades sufridas por el pueblo argentino durante la década pasada, están relativamente mejor que los pueblos de la mayoría de los países de América Latina. Las tasas de pobreza son más bajas en Argentina que en muchos países, el gasto público en salud es más alto y las tasas de analfabetismo son de las más bajas de Latinoamérica. ¿ Por qué entonces la Argentina está hirviendo mientras que los pobres de otros países resisten de manera más apaciguada? Para empezar, Argentina tiene una larga historia de resistencia y rebelión. Revueltas populares han amenazado gobiernos argentinos en épocas pasadas, pero esta es la primera vez que logran forzar a un presidente a irse. La organización política también es parte de la reacción. Los desempleados, conocidos como piqueteros se han organizado para demandar ayuda del gobierno y han bloqueado las carreteras principales en Argentina por varios años ya. El activismo sindical es alto y la huelga general es una táctica históricamente popular. Otra razón de la revuelta son las esperanzas defraudadas, la noción de que el capitalismo no puede cumplir su promesa, la buena vida para todo el que quiera trabajar. La gente se está dando cuenta de que su país ha sido saqueado por instituciones financieras internacionales y que tendrán que pagarles a esas instituciones por muchos años. El mensaje es bien claro para muchos, el capitalismo no funciona. El espíritu de rebelión de Argentina se va a desbordar e inspirará descontento en los países vecinos, notablemente en Bolivia donde el descontento social es muy elevado. Con el propuesto Acuerdo de Libre Comercio de América (ALCA) la apuesta es alta.

¿Fortalecerá más al capitalismo la integración hemisférica o inspirará llamadas hemisféricas a la revolución? ¡Los anarquistas debemos trabajar por lo segundo!

Regeneración

Extraído de a-infosArriba lucha antifascista