Solicitaron una reunión con la dirección, pero la Policía les cerró el acceso a la empresa

Los trabajadores de Selak y de Savera Services bloquearon a lo largo de todo el día de ayer la entrada de la planta de Savera en Bera de Bidasoa. Los trabajadores pidieron una reunión con la dirección del grupo para intentar negociar, pero un cordón formado por la Policía española les impidió el acceso al interior de la empresa. La empresa Selak ha amenazado con cerrar la planta de Hernani si los trabajadores continúan «en esa actitud».

Los trabajadores de Selak y Savera, empresas ubicadas en Hernani (Gipuzkoa), volvieron ayer a la planta de Bera de Bidasoa, a Savera, y permanecieron todo el día concentrados frente a la empresa bloqueando la entrada de camiones. Los trabajadores hablaron con el comité de empresa de Savera, empresa del mismo grupo, para transmitirle sus reivindicaciones.

Asimismo, el comité de Savera comunicó a la empresa las razones que llevaron a los trabajadores de Selak y de Savera Services a la huelga. Los trabajadores esperaron a lo largo de todo el día frente a la empresa una respuesta de la dirección del grupo y optaron por bloquear la entrada y salida de camiones, al no poder entrar en la empresa debido a la presencia de la Policía española. La dirección informó de que se iniciaría la actividad, pero los trabajadores lo impedirán a menos que la dirección se siente a negociar.

Mañana, los trabajadores celebrarán una asamblea para intentar tomar una decisión, pero hasta entonces permanecerán frente a Savera. El pasado viernes el comité de Selak se reunió con la empresa en la delegación de Trabajo en Donostia. En esta reunión la empresa «amenazó» con que si los trabajadores no firmaban el convenio colectivo en quince días y continuaban «en la misma actitud», la empresa recurriría a medidas drásticas y «cerraría la empresa de Hernani».

Los trabajadores de Selak comenzaron la huelga el pasado 3 de enero y los de Savera Services el 16 de enero. El grupo Savera está formado por ambas empresas y por Savera, situada en Bera de Bidasoa. Los trabajadores reivindican una equiparación de las condiciones laborales con la planta de Bera. Apuestan por la reducción horaria y un aumento salarial de 1.803 euros lineales.