Comunicado de la Asamblea contra el TAV

 

Denunciamos a las Cámaras de Comercio por ser la gran fuerza que milita a favor del TAV, indicando que este proyecto de elevado impacto ecológico y social beneficia principalmente a los intereses privados que tras estas instituciones mercantiles se escudan. Es decir: los intereses de las empresas constructoras y productoras de energía, los del sector que negocia el transporte internacional de  mercancías, los de la industria del turismo de masas, en fin, los intereses de los bancos que financian los proyectos y los de los partidos políticos que representan en bloque al interés económico, ¡todos fanáticos del TAV! No es el "interés general" la razón para poner en marcha el TAV, sino el interés de algunos grupos económicos y políticos.

Las Cámaras de Comercio representan el auténtico partido del TAV. Siendo el transporte una fuente de importantísimos negocios, su objetivo consiste en atraer el máximo de los tráficos de mercancías, independientemente de que ello conlleve la expansión insostenible del transporte y su plasmación en infraestructuras vaya originando graves impactos territoriales, sociales y ambientales. Vienen ejerciendo una fuerte presión sobre los gobiernos por la ejecución de un vasto plan de infraestructuras, que convertiría a Euskadi en una gran plataforma de transportes a nivel continental. En esa perspectiva se mueve, efectivamente, la denominada Conferencia Internacional de Cámaras de Comercio del Eje Ferroviario Atlántico Transeuropeo -CEFAT-, grupo de presión constituido por 46 Cámaras de Comercio y asociaciones empresariales afines al proyecto, incluida la Cámara de Gipuzkoa. Son los verdaderos directores de la película, en la que a los gobiernos de Aquitania y de Euskadi les corresponde el papel de marionetas. La construcción de la "Y vasca" del TAV es para las Cámaras la Acción prioritaria en tanto que nuevo corredor principalmente dedicado a la canalización de mercancías, acompañada de una red de plataformas logísticas y del proyecto del Superpuerto de Jaizkibel promovido por la Cámara de Gipuzkoa. El desarrollo desmesurado de los medios de transporte es el resultado de la economía capitalista, desarrollo coronado por el TAV. Por lo que el rechazo del TAV y de las aberraciones infraestructurales que arrasan los territorios y desintegran las poblaciones es para nosotr@s, símbolo de lucha contra este modelo de desarrollo tremendamente productivista, competitivo, gigantista, consumista, generador de desigualdades y destructor de la naturaleza. En realidad, existen muchas medidas para parar el TAV, creando bis condiciones de un estilo de vida pleno y saludable en una sociedad equilibrada, solidaria y libre. Hay que poner de manifiesto que el bienestar individual y colectivo es contrario a la gran velocidad de la economía, poner límites a la urbanización del territorio, reducir las necesidades de transporte, acabar con las especulación inmobiliaria, implicar a los habitantes en la gestión de los lugares de residencia, renunciar al uso de tecnologías que favorezcan la concentración de poder, la pasividad, el aislamiento... Una sociedad emancipada no 'podrá erigirse sino encima de los escombros del capitalismo, regida por principios radicalmente antagónicos. Y ello implica el rechazo a las prácticas mercantiles, y, en cuanto a la alta velocidad, el rechazo puro y duro del TAV, mediante una movilización constante y sin tregua. Entonces, el combate contra el TAV, no será sino un episodio del combate contra la sociedad capitalista.

Ciertamente, la oposición al TAV se enfrenta a poderosos grupos, pero se une a otras muchas resistencias y voluntades, transformadoras que en todo el mundo expresan sentimientos, ideas y denuncias similares frente al desarrollismo y a la sinrazón del "libre comercio" y sus consecuencias económicas, sociales y ambientales.

Desarrollismo Txikitzaileari STOP

Enviado por Agencia Confederal de BilbaoArriba lucha antifascista