"Los tentempiés pueden ser el mayor peligro contra nuestra seguridad nacional desde el 11 de septiembre". Con este pronunciamiento, el jefe de la seguridad doméstica lanzó una nueva fase en la guerra contra el terrorismo, la guerra contra los tentempiés peligrosos. La casi trágica lucha del presidente Bush contra una galleta salada causó nuevas preocupaciones por la seguridad de los líderes de nuestro país.

Este lunes, fuerzas especiales de seguridad barrieron todo Capitol Hill llevándose todos los tentempiés no autorizados de las oficinas, salas de conferencias y tiendas. Por supuesto, las galletas saladas (bretzels) estaban a la cabeza de la lista, pero las nueces, las papitas fritas, y las galleticas eran también sospechosas. Los republicanos cabildearon fuertemente para incluir las salsas en la redada, pero unos cuantos demócratas importantes que han recibido billones de dólares del lobby de la salsa bloquearon esa movida en un comité.

El Departamento de Justicia entró en la pelea con una serie de restricciones de inmigración a la gente que viene de Alemania, donde se cree que se originaron los bretzels. "Tienen bretzels escondidos en las suelas de los zapatos" explicó el subsecretario de política de inmigración. Y el Departamento de Estado comenzó a compilar una lista de todos los vendedores de bretzels calientes de todo el país invitándolos a interrogatorios voluntarios. El FBI prometió facilitar el programa de interrogatorios voluntarios arrestando a todos los vendedores que no se presentaran voluntariamente. Un agente del FBI anónimo notó que ya han comenzado las extensas intervenciones telefónicas y demás actividades de colección de información. El presidente Bush no ha descartado el uso de los tribunales militares contra los supuestos vendedores de galletas saladas. Se espera que dé una rueda de prensa hacia fines de semana cuando su labio herido ya se haya curado.

Mientras tanto, China se apresura a reparar sus relaciones diplomáticas con Washington después de que se reveló que China es el mayor productor de bretzels del mundo. En un documento publicado por la embajada china el día de hoy se dice "Estamos aumentando nuestros esfuerzos para controlar los grupos de oposición en China y hemos efectuado miles de arrestos después del incidente del bretzel. Confiamos que esto no dañará nuestras relaciones comerciales con los EEUU." El subsecretario de relaciones exteriores de la Casa Blanca parecía satisfecho, respondiendo "O estáis con nosotros o contra nosotros. Esto es una guerra total contra los piscolabis peligrosos. China está haciendo grandes progresos en el control de los elementos peligrosos dentro de su país. Y como somos el mayor proveedor a América de jugueticos de plástico, no podemos arriesgar desestabilizar esta relación."