Pasó en Cullera, un pueblo de
Valencia; 22.000 habitantes; civilización, turismo y democracia; ya se
sabe ... si llaman a tu puerta a las 5 de la madrugada, es el
lechero ....
Mohamed es magrebí, argelino.
Educado, amable, simpático, nada de alcohol, nada de cerdo, nada de
broncas. Los camellos no pasan malas rachas, nadan en dinero.
Mohamed pasaba una mala racha, nada de
drogas.
Mohamed, en la segunda semana de
Febrero se topó con la Policía Municipal, si, la de mi pueblo, la de
Cullera, la que está al servicio del ciudadano; amables, simpáticos,
generosos, ecuánimes.
Mohamed no había cometido delito
alguno: a los delincuentes se les detiene, se les acusa, se les juzga,
se les condena y se les encarcela.
Mohamed no experimentó ese protocolo,
no era un delincuente, por eso no le detuvieron, tal vez solo iba
mal vestido, no tenia buena pinta, no, ... pasaba una mala racha.
Mohamed solo soportó una
paliza; las botas de la policía machacaron su cara mora contra la
acera de una calle de mi pueblo, de Cullera. Mohamed tuvo suerte, sólo
tiene la cabeza algo deformada por la izquierda.
Cristian no tuvo suerte.
Fue el martes 19; pocos días después
de lo de Mohamed, el moro. También en mi pueblo, en Cullera; el pueblo
tranquilo, porque,
además de Policía Municipal tenemos a la Guardia Civil.Un alivio.
Cristian tenia unos 19 años, mente
infantil; "le falta un riego" decimos aquí;
atolondrado, incapaz de calibrar, sin malicia, sin dobleces. Su
mentalidad no le daba para eso. Cuando se tuvo que presentar a la mili
ni le admitieron. Era un inconsciente, un básico; tengo hambre, como;
tengo sueño, duermo; tengo calor, me descamiso. Un niño grande,
todo simpleza. Siempre contento. Rebosante de juventud. Un
descerebrado. Pero maleante, no, loco, no, ... y suicida, no;
tampoco.
Cristian tenia, parece ser, un papel
del Forense, de cuando no pudo hacer la mili, que decía que no estaba
como muy bien. Lo del riego que decimos.
Cristian iba a la naranja, y a
la obra, y al mercado, a ayudar a poner los tenderetes los jueves;
también repartía propaganda y a veces de jardinero. Era voluntarioso y
tenia su código de buen trabajador.
Cristian estaba casi solo. Padres
separados; el padre en Canadá luego en Londres, la madre en Cullera,
alcohólica, dicen que vivía, vive, con un moro. Un hermano en Canadá.
La hermana no se sabe. Y su abuela María, jubilada; hace excursiones
con el Inserso. Su familia la calle.
Cristian tenía un viejo vespino. En
verano, en invierno. Me gusta que me dé el aire en la cara,
decía. A veces sin casco, a veces sin seguro, a veces
corría demasiado, a veces metía ruido, a veces se saltaba un semáforo
... , en eso era un conductor habitual.
Cristian cuando, el martes, la
Policía le dio el alto y le paró dijo que no soplaba en el aparato
porque no había bebido. Tendría faena, o prisa, o sueño, o hambre; a
saber.
Cristian, como no era un
delincuente, tampoco pasó por eso tan constitucional de
detención, acusación, juicio, condena y encarcelamiento. O
sí. Pero fue un proceso muy rápido; demasiado.
Dicen que le metieron en el coche a
palos y le llevaron a la Casa-Cuartel de la Guardia Civil. Dicen que lo
sacaron del coche también a palos. Dicen que los hijos de los guardias
oyeron los gritos mucho rato. Dicen que los hijos de los guardias
civiles lo contaban en el cole, a la pandilla.
Dicen que se suicidó ahorcándose con
el chaleco. Dicen que la jueza lo encontró acostado en un banquito del
cuchitril; como dormido.Dicen que la ropa la tiraron a la basura. Dicen
que a la abuela, a María, la de las excursiones, no la dejaron
ver el cuerpo.Dicen que la jueza de Sueca no dice nada. Dicen que una
autopsia independiente vale mucho dinero. Dicen que una abogada de
Cullera y unos de Tavernes están interesados en el caso.
Dicen que el pueblo entero sabe lo que
pasó. Dicen que lo raro es que un ahorcado se recueste como para
dormir. Dicen que le tenían manía, o ganas, o inquina.
Dicen que es mejor no buscarse problemas con según quien. Dicen que al
fin y al cabo esto es un pueblo , que todos tenemos que vivir juntos.
Dicen que para que denunciar si solo te marean y al final nada. Dicen
que para qué liarla; total, ¿a quien le importa?. Dicen que además a
ellos, esto, no les puede pasar.
Habladurías.
En definitiva, ¿a quien le importa un moro o un muerto?