Verónica
Vázquez Almansa, de 22 años, falleció el pasado sábado día 2 de
febrero, al ahorcarse con un cinturón en el comedor de la cárcel de
Huelva.
La joven había adquirido
recientemente el tercer grado penitenciario, por lo que en breve iba a
disfrutar del régimen abierto que conlleva esa clasificación. Su
familia se enteró del fallecimiento de Verónica seis horas después,
hacia las siete de la tarde, cuando se disponía a realizar un vis a vis
.
Según algunos testigos, los
funcionarios les dijeron a la familia de la infortunada que no podían
verla "porque su cuerpo había salido de la prisión en un
ataúd"...
La Subdelegación del Gobierno de
Huelva, informó el mismo sábado a la agencia efe que
"funcionarios de la prisión hallaron sobre las 13.30 el cadáver
de una reclusa que, al parecer , murió ahorcada con un cinturón. La
presa que trabajaba en la enfermería y siempre había demostrado buen
comportamiento, se encontraba en el comedor junto a una compañera,
quien dijo que no advirtió ninguna actitud sospechosa ni pudo
presenciar los hechos".
La joven había sido condenada a tres
años de cárcel cuando tan sólo contaba 17 años, por un delito
relacionado con la toxicomanía de la que estaba siendo tratada en el
Proyecto Hombre.
Esta misma fundación llevaba también
entre rejas su caso. La noticia ha originado la consiguiente
investigación abierta por la dirección del penal. Algunas fuentes
cercanas a la prisión han apuntado que éste puede ser el segundo
suicidio localizado en la prisión onubense en los últimos quince
días, extremo éste que no ha podido ser confirmado por la redacción
del programa.
Enviado por Agencia confederal de
Bilbao