Vida Confederal

Al rescate de la memoria silenciada

 

La CNT de Galicia decidió este año iniciar la conmemoración del 19 de julio bajo el lema de "la memoria silenciada", y para hacerlo escogimos la villa marinera de Moaña, aprovechando su proximidad a Vigo y el hecho de que aun exista un local construido por nuestros compañeros de "Solidaridad Marinera" de los años treinta, que se encuentra reclamado como parte de nuestro patrimonio histórico.

Diversos problemas con sus administradores actuales, el ay-untamiento y el club de jubilados "Nuestra Señora del Carmen" que lo utiliza con su permiso, impidieron que pudiéramos poner una placa en la fachada y dar una charla en su interior. Posteriormente, nos enteramos que los jubilados que regentan nuestro local son los nietos y los hijos de los fachas que lo incautaron.

Hay que señalar que la represión fascista en Galicia fue brutal y sobre todo con nuestros compañeros. En la ría de Vigo, a la que pertenece la villa de Moaña, los meses que siguieron al alzamiento fascista, los marineros que quedaron vivos sabían donde no tenían que echar las redes, pues sabían lo que se iban a encontrar. Al Secretario del sindicato de Moaña y a otros mas los utilizaron como mascaron de proa y los aplastaron contra el muelle, a los de Cangas del Morrazo los echaron en medio de la ría encadenados, entre otros actos macabros que forman parte de la historia oral pero silenciada de nuestro pueblo.

En vista de estos impedimentos, decidimos sustituir nuestras intenciones por otros dos actos: el 18 de julio, realizamos la proyeccion del video "Vivir la utopia" en el "Cafe Teatro", y, a pesar del tiempo que no nos acompaño, tuvimos una afluencia de gente mayor de la esperada. Luego tuvo lugar una charla animada en la que intervino el unico superviviente de la CNT moañesa de aquellos años que no conociamos y que hizo lectura de un manifiesto de denuncia realizado por el mismo.

El 19 de julio, esta vez bajo un cielo azul, hicimos un mitin al aire libre en el paseo marítimo donde , a pesar de no asistir la mayoría de los compañeros de la organización, juntamos a mas de un centenar de personas. Finalmente, el mitin termino con música de gaitas y violines que acompañaban a la ofrenda floral que los propios asistentes realizaban con claveles rojos en el monumento "al marinero".

Señalamos que, con este tipo de actos, se deberían conmemorar en toda España por parte de la CNT todos los 19 de julio, ya que ello nos ayuda a recuperar nuestra memoria silenciada y manipulada por los demócratas de hoy.

Escrito de denuncia por el compañero superviviente:

El día 6 de junio apareció en este mismo periódico una noticia cuyo contenido era el de informar sobre el debate en torno a los propietarios de la actual casa, en la que reside el club de jubilados "Nuestra Señora del Carmen". Hoy me dirijo a ustedes para remitirles parte de la verdadera historia...

El día 18 de julio de 1936, se celebro la Asamblea General de marineros en la susodicha casa. Como marineros que pertenecíamos a este sindicato, a las 7h. aproximadamente acordamos recorrer las casas en busca de armas, de acuerdo con el alcalde de entonces, Sr. Fandiño, que mas tarde seria fusilado en Vigo por este hecho. A las 9h. regrese junto a mis compañeros para dar conocimiento de las armas recaudadas, pero cuando llegamos a los caminos donde hoy esta la iglesia del Carmen, nos vimos obligados a retroceder para devolver las armas, puesto que nuestro dirigente sindicalista nos comunico que los falangistas habían tomado la casa. Al día siguiente, estos recorrieron las casas moañesas en busca de todo el que había sido sindicalista, o delegado de un barco y los trasladaban a la mencionada casa. Allí mujeres y hombres fueron torturados con aceite de ricino, agua salada...e incluso fueron obligados a borrar con sus propias uñas el lema pintado en la pared: "Vale morir para ser libre que vivir para ser esclavo". A pesar de estos hechos y mas, a los pocos días, en esa época en la que los marineros arrastraban los aparejos de sus barcos en un carro hasta La Junquera, se veían obligados a detenerse frente a la casa ocupada para saludar a los falangistas y gritar "Viva España!"

Con esto, quiero mostrar mi indignación por la injusticia que perdura: hoy son muchos los hijos y nietos de aquellos falangistas los que concurren a esa casa propiedad de la CNT, mientras yo y otros muchos pensionistas y jubilados seguimos sin el derecho de ocupar nuestra plaza allí. Perdónenme mi saña, pero somos muchos los que aportamos gran esfuerzo para crear aquella casa sindical y hoy tenemos que ver como la disfrutan otros que repudian la realidad.Enrique Paredes Rivas.

SOV CNT de Vigo