¿Italia hacia una dictadura?

(negado el derecho a la comunicación)

Grupo de Trabajo sobre la Comunicación sin afán de lucro STRANONETWORK

www.strano.net

Extraído de Opinión Libertaria

Si después de leer nuestras reflexiones, decidís responder afirmativamente a esta inquietante pregunta, el segundo interrogante que deberéis dirigir a vuestra conciencia es qué hay que hacer para cambiar el presente estado de cosas. Formulamos estas preguntas después de los sucesos de Génova y, en particular, después del allanamiento perpetrado contra la central de comunicaciones del Fórum Social Global. Tras tres días de masacres en las calles y de un muerto, el joven manifestante Carlo Giuliani, días durante los cuales - y ésta es una ense

ñanza que hay que tener presente en el futuro - las fuerzas del "orden" han actuado contra los centenares de miles de manifestantes pacíficos empleando "sólo" métodos militares (el Black Block ha sido únicamente el pretexto para ello); después de haberse registrado centenares de heridos, muchos de ellos graves, llega en la noche del sábado la noticia del asalto ilegal de un centro de información independiente, suceso sobre el que todos debemos reflexionar y que nos ha llevado a hacernos estas preguntas. La forma en que se han desarrollado las iniciativas represivas de la manifestación desde la muerte de Giuliani hasta las escuadras de infiltrados vestidos al estilo "manifestante" que se mezclaban con la gente en las calles buscando la provocación y, en especial, la forma en que se ha desarrollado este último y gravísimo episodio de la incursión sobre el Fórum Social de Génova nos conduce a la natural conclusión de afirmar que Italia está evolucionando hacia una forma antidemocrática. Antes de que sea demasiado tarde, es necesaria una denuncia inmediata y una reacción política a nivel internacional para intentar salir de este nuevo clima de dictadura. Hasta los medios oficiales están transmitiendo las imágenes de cuanto ha ocurrido, pero,de todas maneras, nosotros invitamos a tomar en consideración las siguientes fuentes de información independiente para una acertada visión de los hechos:

www.italy.indymedia.org

www.radiogap.net,

www.ecn.org/g8,

www.tmcrew.org,

www.carta.org,

www.genoa-g8.org,

www.decoder.it.

Han ahogado en sangre un experimento de autogestión de la información que cubría no sólo la Red (donde afluían masivamente audio, vídeo, imágenes que después han recorrido los principales medios de comunicación mundiales), sino también el mundo real (donde estas contrainformaciones eran difundidas a través de la emisora de radio del movimiento y en las calles de las ciudades italianas),transformando una experiencia comunicativa en problema de orden público. Radiogap de Génova ha dejado de funcionar después de la irrupción brutal de la policía, mientras las últimas palabras en directo clamaban: " Es como Chile, es como Chile...calma, sentados y manos arriba... resistencia pasiva". Después, Génova en silencio. Un silencio que es un puñetazo en el estómago. Llegados a este punto, denunciamos los siguientes hechos concretos sucedidos esta noche: 22 julio 2001. En la sede operativa del movimiento pacífico de protesta del Fórum Social de Génova, sede también de la actividad de producción de información independiente sobre las manifestaciones anti-g8, y con la única y evidente finalidad de poner fin a la operación de denuncia por parte de los medios de comunicación independientes sobre el despliegue represivo contra el movimiento pacífico llevado a cabo durante el día:

- han sido heridas y arrestadas todas las personas que se hallaban en el interior del centro

- han sido apartados violentamente los parlamentarios y los abogados de la escena de la masacre

-ha sido registrado y secuestrado material y equipo informativo y han sido dañados equipos de manera (inútil decirlo) ilegal e ilegítima.

Todos estos hechos no sólo son graves, inconstitucionales, ilegales, ilegítimos, inadmisibles y muchas cosas más. Constituyen también la señal de que Italia es, ahora más que nunca, incapaz de garantizar las libertades democráticas y constitucionales de sus propios ciudadanos, y por este motivo invitamos a los periodistas y a las fuerzas políticas, especialmente a las no italianas (puesto que las italianas no se sabe hasta cuándo tendrán posibilidades de actuar políticamente) a denunciar toda forma de violencia contra el derecho a hacer contrainformación.